El conflicto sirio se recrudece en las principales ciudades y las fronteras
Los soldados sirios, apoyados por tanques y helicópteros, luchaban ayer contra los rebeldes para retomar el control de algunos barrios de Damasco y Alepo, mientras las fronteras con Irak y Turquía seguían siendo objetivo de los dos bandos en combate.
GARA | DAMASCO
Los intentos de los rebeldes sirios de mantener el control de Damasco y Alepo y tomar algunos puestos fronterizos recrudecieron ayer los combates con las tropas gubernamentales, que tratan por todos los medios de aplastar a los insurgentes.
Después de una semana de violentos enfrentamientos en la capital, los choques entre las fuerzas del régimen de Bashar al Asad y el Ejército Libre Sirio (ELS) se extendieron el sábado a Alepo, que como Damasco se había mantenido hasta hace poco relativamente al margen.
Uno de los portavoces del ELS dentro de Siria, el coronel Qasem Saadedin, explicó a Efe que su grupo está desplegando un mayor número de brigadas en Alepo con el fin de controlarla en «los próximos días». El sábado por la noche, el comandante del ELS en esta provincia, el coronel Mohamed al-Aquidi, había anunciado el inicio de «la ofensiva para la liberación de Alepo», y había dicho que la mayoría de las zonas de los alrededores estaban bajo control rebelde.
Los combates se central en los barrios centrales de Al-Yamiliya, Al-Meridiyan y Al-Zabadiya, y en zonas del suroeste de la ciudad.
Mientras, la lucha por Damasco continúa y, según Saadedin, el ELS intentan tomar el control de sitios estratégicos, como las sedes de la comandancia general del Ejército, de los servicios secretos y de la radio y la televisión, aunque el sábado las tropas leales a Al-Assad recuperaron el control de algunos barrios.
También persisten los bombardeos de las fuerzas gubernamentales con helicópteros y artillería contra los barrios de Al Qadam, Al Mezzeh, Al Asali y Kafr Susa, así como contra localidades de la periferia, extremo que la televisión siria desmintió.
Además de en Damasco y Alepo, las operaciones de las fuerzas del régimen siguieron castigando Homs, Idleb y Deir el Zur.
El conflicto ha adquirido un nuevo cariz tras el atentado del miércoles contra la cúpula de seguridad y Defensa y desde entonces, según el ELS, las deserciones se han multiplicado.
El otro frente de batalla son las fronteras, después de que en los últimos días varios pasos fronterizos con Irak y Turquía cayeran en manos rebeldes.
Sin embargo, el Ejército recuperó ayer el control del paso con Irak de Al-Yarbia, del que se había apoderado la víspera el ELS, que controla desde el jueves el cruce de Al-Bukamal, mientras que un tercer paso en Irak, el de Al-Walid, todavía se mantiene en pugna. Los rebeldes también tiene en su poder desde ese día el de Bab el Haua y Bab el Salama, en la frontera con Turquía.
Las fronteras con Líbano y Jordania están controladas por el régimen.
Según denunció hoy el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que opera en la capital siria junto a la Media Luna Roja, la situación para los habitantes de Damasco es crítica y empeora día a día dado que ya no quedan lugares donde protegerse y empiezan a escasear los víveres.