Los diputados kurdos urgen a Erdogan a liberar a Ocalan para desbloquear el diálogo
GARA | ESTAMBUL
Los parlamentarios kurdos han hecho un llamamiento al Gobierno de Turquía para que libere al líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdulah Ocalan, señalando que el fin del conflicto armado no se alcanzará hasta que salga de la cárcel.
En una comparecencia pública realizada el sábado junto a activistas defensores de los derechos humanos, los parlamentarios kurdos que tacharon de «inhumanas» las condiciones en las que permanece encarcelado Ocalan, encarcelado en la isla-prisión de Imrali, donde permanece totalmente aislado sin que haya podido ver a sus abogados ni a sus familiares en todo un año.
«Si va a haber una paz negociada, el aislamiento de Ocalan debe finalizar», remarcó la diputada Emine Ayna, del prokurdo Partido de la Paz y la Democracia (BDP). «Una mesa de negociaciones en la que una de las partes retiene la llave de las esposas de la otra no arrojará ningún resultado», vaticinó Ayna, según recogió la agencia de noticias Reuters.
Ocalan, cuyo estado de salud preocupa al BDP y a los activistas pro derechos humanos, fue sentenciado en 1999 a cumplir cadena perpetua en la isla-prisión ubicada en el mar de Mármara.
El opinión de otro de los diputados del BDP, Aysel Tugluk, «todos han de aceptar que Ocalan represente al pueblo kurdo» en las negociaciones para poner fin al conflicto. «Ocalan ha pedido el alto el fuego y un fin democrático del conflicto», precisó Tugluk.
Desde el arresto de Ocalan, la frecuencia de los enfrentamientos entre el Ejército turco y los guerrilleros del PKK, una organización en la lista negra de EEUU y de la Unión Europea, se han intensificado, como han aumentado los bombardeos sobre de la aviación turca en determinadas zonas del Kurdistán iraquí, donde, según Ankara, tiene su refugio el grueso de los combatientes del PKK.
El acercamiento de las posturas se sustentaría sobre pequeños avances en materia educativa y cultural que se encaminan a una aceptación de los estándares sociales kurdos por parte del Gobierno de Recep Tayyip Erdogan. Sin embargo, Ankara no cesa en su represión contra el pueblo kurdo, mediante redadas contra políticos, pediodistas, sindicalistas, personalidades del mundo de la cultura o de cualquier otro ámbito, siempre acusados de vinculación con el PKK.
Desde 1984 más 40.000 personas han perdido la vida desde 1984 en este tipo de enfrentamientos y más de 8.000 kurdos han sido detenidos por las autoridades de Turquía.