Si en categoría masculina la selección de Estados Unidos es la gran favorita a lograr la medalla de oro en baloncesto, en categoría femenina este favoritismo es, si cabe, mayor. Desde que en Barcelona'92 la extinta URSS, conocida en aquel entonces como Comunidad de Estados Independientes -CEI-, se colgara el oro, el combinado norteamericano no ha faltado a su cita dorada. Solo el inesperado traspié del mundial de Brasil 2006 ante Rusia se ha colado en estos 20 años de dominación.

Y nada hace indicar que Londres 2012 sea una excepción. El equipo estadounidense al completo está formado por jugadoras que juegan en la WNBA, con gente de la talla de Sue Bird, Diana Taurasi, Asjha Jones o Candance Parker en sus filas, mientras que del resto, China, Angola, República Checa, Croacia, Turquía, Australia, Brasil, Gran Bretaña, Rusia, Francia y Canadá, solo la australiana Lauren Jackson y las brasileñas Erika de Souza y Damiris Dantas juegan en los Estados Unidos.

Parece que la pelea por la plata y el bronce será la más divertida. Australia ha subido al cajón desde 1996 -bronce en Atlanta y plata en Sidney, Atenas y Beijing-, mientras que Rusia ha sido bronce en las dos últimas ediciones.

A esta hegemonía hay que añadirle Brasil, plata en Atlanta y bronce en Sidney, en la que juega la hondarribiarra Francielle Nascimento y aunque haya perdido a la ex de Hondarribia-Irun Iziane Castro por indisciplina. La Francia de Dumerc, Gruda, Yacoubou y Lepron también opta a llegar a semifinales.