Pintura, grabado, serigrafía, cine, fotografía, instalaciones, video y escultura. Sonidos, olores, imágenes y texturas. Seis artistas de Urdaibai (Iñigo Acha, Ibai León, Jon Lambroa, Rober Garay, Jose Angel Uberuaga «Ube» y Aristide Stornelli) han combinado dichos elementos dentro de la antigua conservera Ormaza dando lugar a una muestra de arte contemporáneo multidisciplinar que busca tanto la reflexión sobre nuestro propio ser como descubrir la intrahistoria e idiosincrasia de la comarca de Urdaibai.

Todas las obras de la muestra se han realizado dentro del mismo edificio buscando la empatía para con este y sus diferentes espacios. No hay, por otro lado, ambientes definidos para cada artista: todos han trabajado de forma transversal, como un solo creador con seis cabezas. La interrelación entre creadores y trabajos mantiene una misma tensión, una comunión de temas, interés y propósitos, haciendo que las propias obras desborden sus respectivos marcos formales.

La exposición se extiende desde la misma puerta de entrada hasta el ático, ocupando vanos, paredes y cualquier tipo de espacio susceptible de convertirse en soporte y parte de las mismas obras de arte. Sonidos y olores se entremezclan con las instalaciones o las fotografías de tal modo que la percepción de cada persona será, por fuerza, diferente. De hecho, pretenden que el público no se limite a contemplar; pretenden que quien visite Ormaza se convierta en un descubridor: «Un toque de atención a una sociedad que no se para a mirar», como señaló Alberto Palomera, comisario de esta muestra.

En este orden de cosas, el público se encontrará con el trabajo de Aristide Stornelli, «Scratching the train»: mediante fotografías narra el viaje en tren desde la estación de Atxuri (Bilbo) hasta Bermeo con la peculiaridad de que son los cristales del tren el objeto retratado, prueba, según Palomera, de que «cada cual construye su propia realidad».

Para Jose Angel Uberuaga Ube el arte debe ser crítica, compromiso y «provocación continua». No concibe el arte como la producción de meros objetos ornamentales, como objetos de compra y venta, fruto de una técnica determinada. El arte debe cumplir la función de hacernos reflexionar y, en este esquema, la provocación juega un papel fundamental como catalizador de emociones y sentimientos, como pie a la autocrítica sobre nuestro devenir.

Las obras de Ube, todas de gran tamañoson ejemplo práctico y plástico de su discurso.

También Ibai León se apunta a lo provocador como disparador de ideas. Ibai ha trabajado en diferentes medios y soportes, no faltando la música, los sonidos, la fotografía o el dibujo. El artista definió su obra como «paisajes conceptuales» que son fruto de una «reflexión sobre sus recuerdos». Mejor no desvelar códigos e imágenes utilizadas por Ibai León: que la sorpresa y la transgresión cumplan su objetivo.

Por otra parte, el taller-laboratorio de Ibai permanece abierto para que el público pueda aprehender el proceso creativo en su doble faceta conceptual y estética.

En realidad, todos ellos se mueven con libertad en casi todo tipo de expresión artística y jugando con la combinación de sentidos para despertar diferentes percepciones en el público. Jon Lambroa con «urTAibai argigrafiak» o Iñigo Acha con su corto «Inundita» (hace uso de lo mitológico en un corto que hará que el cine se «desparrame» por la fábrica) son dos claros ejemplos de lo expuesto, aunque no los únicos, por supuesto.

Rober Garay ha centrado su esfuerzo en generar «un pasado que no fue», jugando con una fábrica de conservas que tiene a criaturas fantásticas (nereidas, ninfas, tritones, narvales zaldigorris) como materia prima. «Coelacanthus Biscayensis... hubo un tiempo de quimeras...», nombre del trabajo de Garay, ocupa, principalmente, una oficina; de hecho, recrea un gabinete: cartas de navegación, una vieja radio sonando y latas de narval en aceite o nereidas en salmuera se apilan aquí y allá.

A modo de «relicario», una serie de vitrinas exponen «objetos recuperados», intrumentos y herramientas empleados en esta célebre fábrica de conservas; una manera de dar «verosimilitud» a este «asombroso universo acerca de la cosmogonía mitológico-industrial de un tiempo que no pudo ser».

Si algo se puede decir de esta muestra de arte contemporáneo, de esta expedición por lo que una vez fueron las oficinas de la fábrica de conservas, es que es muy divertida, original y sorprendente. Más allá de las preferencias de cada persona, podemos afirmar que la exposición no dejará indiferente a nadie. Esta es, en definitiva, su meta.

Como ya señalara en la presentación de «Urdaibaiarte ON», el pasado 13 de julio, Pello Gutierrez, gerente de la fundación 2012 Euskadi, la muestra quiere servir para «abrir camino» a los artistas de la zona.

Es deseo del gobierno de Lakua que Ormaza sea otra de las piezas que formen el proyecto de «fábricas de creación».

La exposición puede ser visitada de martes a domingo, de 11.00 a 14.00 horas y de 18.00 a 21.00. La vieja fábrica de Ormaza se encuentra situada en el centro urbano de Bermeo, en Askatasuna bidea, 34, en concreto.

Está organizada por la fundación 2012 euskadi y cuenta con el apoyo y colaboración del Ayuntamiento de Bermeo

«Athleee...clic! Bihotz zaletasun baten irudiak - Gu gara nagusiak» izeneko argazki erakusketa egongo da ikusgai irailaren 28ra arte, Bizkaiko Batzar Nagusietako erakusketa aretoan (Bilboko Hurtado de Amezaga kaleko 6. zenbakian). Emozio karga handia duten argazkiak dira, bakoitzak modu ezberdinean sentituz, baina guztiek Athletic bihotzean. Ezin ezezta daiteke aurten Athleticek denboraldi paregabea egin duenik. Hala eta guztiz ere, zapore gazi-gozokoa, Bukarest eta Madriletik esku hutsik bueltatu baitziren zaleak. Nahiz eta finalik ez irabazi, badirudi sentimendu zuri-gorria inoiz baino biziago dagoela eta horixe bera islatzen dute erakusketako 54 argazkiek.