CRíTICA: «Café de Flore»
El dj cineasta que mezcla música y sentimientos
Mikel INSAUSTI
La nueva propuesta de Jean-Marc Vallée no es fácil de encajar racionalmente, por lo que es mejor dejarse llevar por la pura subjetividad de su complejo estilo visual que se sustenta estéticamente en la filosofía New Age. El québécois se permite incluso coquetear con el tema de la reencarnación, todo con tal de envolver en el misterio dos historias conectadas entre si en el tiempo y en el espacio de una forma intangible.
En «C.R.A.Z.Y.» ya se pudo observar que a Vallée le gusta proyectar el material autobiográfico hacia niveles oníricos, lo que en «Café de Flore» alcanza ya una dimensión mística. Esta vez se identifica con el protagonista en la parte que se desarrolla en el presente, un disc jockey que le sirve de metáfora viviente para hacer sus propias mezclas de música y sentimientos. Así, la película tiene cambios de ritmo, parones y momentos climáticos, comparables a los de la sesión de un pinchadiscos. El título de la película se corresponde con la composición homónima de Matthew Herbert, de la que existen muchas versiónes con distintas remezclas e instrumentaciones, de manera que permite viajar del pasado a la actualidad sin cambiar de leit motiv musical. Otro vínculo emocional entre el personaje pretérito de Vanessa Paradis y el contemporáneo de Kevin Parent se establece a partir del hecho de que los dos son cantantes en la vida real. En lo teórico Vallé invoca a la conceptualidad de Pink Floyd, y por eso muestra el prisma que descompone la luz en la portada más famosa del grupo, dado que ambos protagonistas se encuentran atrapados en una relación triangular.
En lo tocante a la historia retrospectiva con Vanessa Paradis, que ejerce de madre que cría sola a su hijo con Síndrome de Down, la tercera en discordia es una niña con idéntica discapacidad a la que el pequeño conoce en la escuela especial. En el drama paralelo protagonizado por Kevin Parent, el lado que cierra el triangulo lo representa su esposa, la cual creía ser la mujer de su vida. Pero, de repente, ella ve cómo es abandonada por él, y cómo las hijas del matrimonio han de aceptar a otra madre que no es la biológica.