El Tesoro Público español aprovechó la mejora de los mercados y la bajada de la prima de riesgo hasta los 465,4 puntos para colocar 4.514,61 millones en letras a 12 y 18 meses, algo más de lo previsto, y a tipos sensiblemente más bajos que en la anterior ocasión. El organismo superó ligeramente sus objetivos, ya que esperaba captar entre 3.500 y 4.500 millones de euros. La demanda, por su parte, se situó por encima de los 10.500 millones.

En concreto, el Tesoro colocó 3.532,98 millones en letras a 12 meses de los 6.755,56 solicitados por los inversores. La demanda bajó ligeramente respecto a la emisión de julio, ya que superó en 1,9 veces lo ofrecido por el Tesoro frente a las 2,2 veces de la anterior ocasión.

Aún así, el Tesoro rebajó considerablemente el interés de este tipo de papel al ofrecer una rentabilidad media del 3,070%, frente al 3,918% de julio. El interés marginal, por su parte, pasó del 3,990% anterior al 3,207% actual. Por otro lado, el Tesoro colocó 981,63 millones en letras a 18 meses de los 3.909,01 solicitados por los inversores. La demanda superó en 4 veces lo ofrecido por el organismo, más que en la emisión de julio (3,7 veces).

Bonos del Santander

El Banco Santander aprovechó la bajada de la prima de riesgo y reabrió el mercado de deuda para las entidades privadas con una colocación de bonos a dos años por importe de 2.000 millones de euros a un tipo de interés del 4,375%.

Esta entidad culminó la primera emisión de deuda corporativa que se lleva a cabo desde hace medio año tras recibir demanda por 3.000 millones de euros al abrir los libros, lo que supone 1.000 millones por encima del objetivo inicial.

La sobredemanda inversora permitió al Santander reducir en cinco puntos el tipo de interés ofrecido originariamente hasta fijarlo en 390 puntos básicos más «midswap», referencia para este tipo de renta fija.