Suecia dice que no extraditará a Assange si hay riesgo de pena capital
El Gobierno de Suecia ha asegurado que no extraditará a Julian Assange a EEUU en el caso de que este pudiese llegar a ser condenado a la pena de muerte en aquel país por revelar documentos secretos a través de su polémica web. El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, advirtió a Londres de que sería un «suicidio» asaltar su Embajada porque ello abriría la puerta al eventual allanamiento de cualquier legación británica.
GARA | ESTOCOLMO
«Nunca entregaremos a una persona que se vea amenazada por la pena de muerte», afirmó Cecilia Riddselius, vicedirectora de Asuntos Penales y Cooperación Internacional en el Ministerio sueco de Justicia en declaraciones al diario alemán «Frankfurter Rundschau».
Antes de decidir sobre la posibilidad de que el fundador de Wikileaks, Julian Assange, sea extraditado a Estados Unidos este país debería garantizar a Suecia que el prisionero en ningún caso sería ejecutado, aseguró la alta funcionaria de Justicia del país escandinavo.
Asimismo, subrayó que la Justicia estadounidense no ha dado hasta ahora paso alguno ante Suecia para solicitar formalmente la extradición de Assange, al igual que no lo ha hecho por el momento ante las autoridades británicas, que deberían ser las que autorizaran esa segunda entrega.
Assange es reclamado por la Justicia de Suecia por las denuncias de dos mujeres por presuntas agresiones sexuales que él ha negado reiteradamente.
El fundador de WikiLeaks, de 41 años, lleva refugiado en la Embajada ecuatoriana en Londres desde el 19 de junio, cuando pidió protección al presidente, Rafael Correa, cuyo Gobierno le concedió el pasado jueves asilo diplomático. Hasta entonces se encontraba en arresto domiciliario tras ser detenido en Londres en diciembre de 2010 por orden de la Fiscalía de Suecia. Su entrega a este país fue por el Tribunal Supremo el 14 de junio.
«Sería un suicidio»
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, considera que si Gran Bretaña cumple su amenaza de asaltar la Embajada del país andino en Londres para detener al fundador de Wikileaks, Julian Assange, «sería un suicidio».
«Si Reino Unido viola la soberanía ecuatoriana sería un suicidio, porque después se podrían violentar las embajadas británicas en cualquier parte del planeta», argumentó Correa en una entrevista con Ecuador TV.
En caso de que la amenaza británica se materialice, el mandatario advirtió de que Ecuador «reaccionaría con firmeza», aunque «con la ley en la mano», para hacer que se respete el Derecho Internacional, que establece la inviolabilidad de las misiones diplomáticas.
En concreto, señaló la posibilidad de trasladar la crisis diplomática a «instancias internacionales», entre las que mencionó «el Consejo de Defensa (Seguridad) de Naciones Unidas», informó el diario «El Telégrafo».
Además, Correa confió en que la Organización de Estados Americanos (OEA) emita una resolución «clara y contundente» contra la amenaza británica, en la reunión de ministros de Exteriores que celebrará el viernes, y criticó a EEUU y Canadá, los únicos países que se opusieron a celebrar una sesión extraordinaria sobre la amenaza británica, argumentando que se trata de un problema bilateral. «Cuando violen sus misiones diplomáticas veremos qué dicen. Veremos si una amenaza de este tipo contra EEUU es una amenaza bilateral», indicó.
En este contexto, Correa instó a sus colegas regionales a reflexionar sobre el papel de los países latinoamericanos en relación con el de las potencias occidentales. «Tenemos que plantearnos si seguimos siendo unos tontos útiles que firmamos absolutamente todo, cuando hay países que no se someten a nada», dijo.
Denunció que los países latinoamericanos han suscrito todos los tratados internacionales destinados a evitar la violación de los derechos humanos: el Pacto de San José (regional) y la Convención de La Haya (universal), mientras que «EEUU no ha firmado el Pacto de San José» y «Reino Unido no reconoce a La Haya».
Noam Chomsky, Naomi Wolf, Oliver Stone, Michael Moore, Danny Glover, Bill Maher o Daniel Ellsberg, que filtró los «papeles del Pentágono», son algunos de los más de 4.000 firmantes de una carta que la organización Just Foreing Policy ha remitido a la Embajada de Ecuador en Londres apoyando la decisión de su Gobierno de conceder asilo a Assange.
El grupo de piratas informáticos Anonymous lanzó entre el lunes y el martes diversos ataques de denegación de servicio contra varias páginas web del Gobierno británico, según ha informado el Ejecutivo de David Cameron, en protesta por las amenazas de Londres de entrar en la Embajada ecuatoriana y detener a Julian Assange.
La oficina del primer ministro, David Cameron, y el Ministerio del Interior señalaron que los ataques apenas provocaron problemas, aunque el Ministerio de Justicia indicó que su web sí que se vio afectada.
«Es una página de información pública que no aloja datos sensibles. Se han adoptado las medidas para que la página siga funcionando, aunque algunos visitantes no han podido acceder a ella», indicó una portavoz de Justicia.
La Oficina de Cameron señaló que el ataque ha sido «un fracaso».
En su página de Twitter, Anonymous indicó que la página del Ministerio de Justicia estaba caída y relacionó el caso con la forma en la que Londres lleva la extradición de Assange. GARA