Tito Vilanova destacó que en el vestuario azulgrana recuerdan perfectamente que el año pasado la derrota contra Osasuna en El Sadar les frenó en su camino hacia el título de Liga, que no alcanzaron. «Los jugadores son los primeros que saben que el año pasado nos dejamos una parte importante de la Liga», señaló ayer el entrenador, para asegurar que no existe ningún tipo de relajación.

«Cuando perdimos allí (3-2), nos empezamos a dar cuenta de que sería difícil ganar la Liga porque nos dejamos unos puntos que nos costaría recuperar», recordó finalizado el entrenamiento.

Vilanova describió el feudo navarro como un «campo difícil por la gente», debido a que ésta «la tienes encima», y también destacó los valores de Mendilibar, «por su manera de apretarnos. Es un entrenador valiente que no espera, sino que te viene a buscar arriba». Insistió en que no existe «ningún peligro de que -los barcelonistas- se relajen. Están avisados».