Exigen buscar trabajo durante 30 días antes de pedir los 400 euros de ayuda
El Gobierno español exige que los parados que cobren la ayuda de 400 euros hayan buscado trabajo durante un mínimo de 30 días después de dejar de percibir la prestación o subsidio por desempleo y que presenten un certificado que detalle si tienen más asistencia.
GARA |
Así figura en el Real Decreto-ley que prorroga por tercera vez el programa de recualificación profesional -conocido como Plan Prepara-, que se publicó ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y que entrará en vigor hoy, con efecto retroactivo desde el 16 de agosto.
Para percibir ese apoyo financiero se exigirá que los parados que ya no perciban la prestación o el subsidio de desempleo lleven inscritos como demandantes de empleo al menos 12 de los últimos 18 meses o bien tengan cargas familiares. Cuando dejen de cobrar la prestación o el subsidio, los parados tendrán que realizar «durante un período mínimo de treinta días acciones de búsqueda activa de empleo, las cuales se deberán acreditar en el momento» de la solicitud de la ayuda de 400 euros.
Según fuentes del Ministerio español de Trabajo, entre esas acciones puede incluirse, por ejemplo, un trabajo que haya durado unos días o unas pocas semanas y, en consecuencia, no genere derecho a prestación.
En cualquier caso, los técnicos de Trabajo ultiman el desarrollo reglamentario de los requisitos de acreditación, que no serán muy diferentes de los que ya se aplican para cobrar las prestaciones de desempleo, señala un portavoz del organismo encabezado por Fátima Báñez..
16 de agosto, fecha clave
Además, los nuevos requisitos de acreditación de búsqueda de empleo durante 30 días no serán aplicables a los solicitantes que agotaran la prestación por desempleo antes del 16 de agosto, fecha a partir de la cual se aplicarán las condiciones del Real Decreto-ley. Los solicitantes de la ayuda de 400 euros también deberán aportar un certificado emitido por su comunidad autonómica o entidad local «donde se haga constar la percepción o no» de todos aquellos subsidios -con su correspondiente cuantía- que pudieran cobrar el beneficiario y/o su unidad familiar.
De esta manera, el Ejecutivo español busca asegurarse de que no se solapa la ayuda del plan Prepara con otro tipo de ayudas autonómicas, de forma que un beneficiario no llegue a cobrar más de 400 euros -que es también el límite para percibir esas asistencias de forma conjunta-.
El Gobierno también tiene previsto proponer ante la Conferencia Sectorial de Empleo y Asuntos Laborales que los resultados del seguimiento del plan «sean tenidos en cuenta en la distribución de fondos destinados a políticas activas para las Comunidades Autónomas».
El programa contempla que esta ayuda solo se puede cobrar una vez por un periodo de seis meses y sin posibilidad de repetir.
Será necesario que los ingresos de la unidad familiar no superen los 481 euros mensuales por cada miembro integrante de la misma.
El Gobierno dice que quieren dar prioridad a quienes tengan cargas familiares frente a quienes tengan un «colchón familiar».
La consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, afirmó que el Gobierno de Lakua, no dejerá «indefensos a los jóvenes» como, a su juicio, «sí hace el plan Prepara» del Ejecutivo español, porque, a través de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) o de los diferentes programas de Lanbide «tendrán una oportunidad de entrar al mercado laboral».
Además, Zabaleta señaló que, aunque la ministra Fátima Báñez «ha anunciado una colaboración con las comunidades autónomas», ellos «no han sido consultados en ningún momento». «El gobierno de Madrid desprecia a las comunidades y a los agentes sociales al no consultar a nadie a la de tomar unas medidas de tanta magnitud», dijo.
Según sus datos, Lakua ofrece en prestaciones económicas el doble que el plan Prepara . «Para una pareja en paro con dos hijos a su cargo, la RGI se sitúa en 870 euros, mientras que la ayuda máxima de Madrid queda en 450 euros», apuntó. «Asistimos a una nueva muestra de un gobierno inconsistente, que cuando gobierna dice lo contrario que en la oposición, cuando exigía la ampliación de este programa», afirmó.
Para Zabaleta al «recortar» el subsidio, el Gobierno de Mariano Rajoy «hace recaer las cargas del desempleo de los jóvenes en el colchón familiar de los padres», y, en este sentido, añadió que «el Gobierno vasco vigilará que el de Madrid no perjudique a los vascos analizando el ámbito competencial de las medidas adoptadas». GARA