BARAKALDO 0

DEPORTIVO ALAVÉS  1

Mejor imposible. Buena imagen y gran resultado del Deportivo Alavés para empezar la temporada. El conjunto de Natxo González realizó un trabajo sobrio, adornado por momentos con detalles de calidad, para derrotar a un correoso Barakaldo en su regreso a Segunda B (0-1).

Un solitario tanto del mediapunta Luismi en el tramo final, después de una espectacular acción de Rubén Negredo, justo cuando los locales se habían quedado con un hombre menos por expulsión de Alberto Delgado, permitió a los babazorros mantener el marcador tras un excelente trabajo coral de un conjunto muy compacto. El Deportivo Alavés salió muy fuerte y poco le faltó para adelantarse en el marcador en los primeros compases. Su técnico Natxo González apostó por adelantar mucho las líneas y eso se plasmó muy pronto en el dominio del balón. Por si fuera poco, la movilidad de los centrocampistas albiazules hizo el resto en un inicio muy prometedor de los babazorros. Sendoa, con un chutazo desde la frontal, y el central Javi Hernández, tras el consiguiente saque de esquina, pusieron a prueba a Aitor Fernández. El Glorioso controlaba la parcela ancha gracias al buen trabajo de Jaume y Miki, mientras que el Barakaldo sólo podía defenderse y su zaga, demasiado apurada, sufría con la verticalidad de Jonan y compañía. El dominio visitante no se concretó en más ocasiones y poco a poco el encuentro se niveló.

En el inicio del segundo acto apenas había espacios para combinar. Demasiados pases en largo y sólo a balón parado se creaba peligro. Méndez casi anotó en propia puerta y a renglón seguido Miguel Martínez se lució con una gran estirada al libre directo de Alberto. El encuentro parecía anestesiado pero en el ecuador del segundo tiempo una contra albiazul empezó a cambiar el panorama. El lateral derecho Rubio no supo rebasar en el mano a mano a un Aitor Fernández que aún tuvo tiempo de salvar a los fabriles de una derrota más amplia.

Sin embargo, el cancerbero nada pudo hacer cuando Rubén Negredo controló el esférico de espaldas dentro del área y, con una sutil maniobra, se marchó de sus defensores para ceder a Luismi, que sólo tuvo que empujar al fondo de las mallas.

Miguel Martínez

Excelente actuación del guardameta riojano. Estuvo muy sólido bajo palos y solventó con brillantez las dos únicas pero muy claras ocasiones de los fabriles.