Representantes de los trabajadores de Celsa se reunieron ayer con el diputado de Hacienda, José Zurita, para pedir a la institución foral ayudas para la empresa en el caso de que la dirección llegue a un acuerdo con los empleados.

La dirección de Celsa Atlantic presentó un ERE de extinción que afecta a la totalidad de la plantilla de sus plantas de Gasteiz y Urbina, 352 empleados. El próximo 18 de setiembre el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) decidirá si acepta el ERE o estima la demanda de los trabajadores contra el mismo. En los últimos días se han celebrado actos de conciliación entre la empresa y los trabajadores, pero la situación actual es que el goteo de despidos no cesa y el pasado martes se produjeron otros 23.

En declaraciones a los medios, el presidente del comité de empresa, Nando Anguiano, denunció ayer que la empresa está «coaccionando y amenazando» a los trabajadores en huelga para que se incorporen a sus puestos, lo que ha llevado a un centenar empleados a deponer su actitud y a volver al trabajo.

Asimismo, aseguró que las amenazas de despido son ciertas porque «los últimos 23 despedidos son huelguistas». La cifra total de despedidos hasta la fecha alcanza los 149 trabajadores, un número «demasiado alto», advirtió.

«Maniobras» de la empresa

El representante de los trabajadores denunció las maniobras de la empresa para hacer volver a sus puestos a los huelguistas y las calificó como «un ataque frontal contra el derecho a la huelga», por lo que si se vuelve a repetir la situación, el comité tomará «las medidas oportunas», apuntó.

Asimismo, manifestó que la empresa está incurriendo en una contradicción porque, por un lado, dice que quiere cerrar las plantas y, por otro, coacciona a los trabajadores para que entren a sus puestos. Por otro lado, explicó que en los últimos actos de conciliación que han tenido, el Gobierno de Gasteiz trasladó al comité su impresión de que el grupo Celsa está tomando «medidas desproporcionadas».

Además, Anguiano señaló que es «falso» que las plantas de Laminaciones estén trabajando con normalidad porque «hay secciones enteras que han echado a la calle». No obstante, declaró que el comité sigue «abierto a negociar» y pidió a la Diputación alavesa que en caso de que se alcance un acuerdo, destine parte de las ayudas de hasta 12 millones de euros que tiene presupuestadas para financiar proyectos estratégicos en empresas, a las plantas de Celsa en este herrialde.