Como Galicia Rías Baixas se ha llevado las cuatro ediciones de la bandera femenina de La Concha, es evidente que es la referencia y la rival a batir. Por eso resulta chocante ver que la «Rianxeira» pasaba a la regata del domingo con el cuarto mejor tiempo; es decir, con el peor registro de las clasificadas. Zumaia fue la mejor, cosa que no contituía una sorpresa, seguida por Getaria-Tolosa. Pero es que incluso una Pasai Donibane más que competente superó a las gallegas que, no obstante, seguro que subirán su nivel cuando llegue la hora de la verdad.

La «Rianxeira» vivió hecha un manojo de nervios la regata calificatoria. Ya las cosas se les torcieron en el calentamiento después de sufrir un desperfecto al tocarse con la embarcación de Hibaika, que sufrió lo indecible para gobernar su bote en unas aguas muy poco dispuestas a dar cuartel a las patronas. Seguramente, las campeonas de La Concha no se quitaron el susto del cuerpo el resto de la tarde.

Así las cosas, la regata femenina vivió un leve retraso, con lo que la guerra de nervios alcanzó un nivel difícil de sobrellevar.

Una vez metidos en materia, cabe decir que hubo pocas sorpresas, aunque sí algún sobresalto que otro. Por ejemplo, sorprendió ver que Orio salía sin agarrar la estacha, de modo que los jueces sancionaron a la trainera «Txiki» con diez segundos. Asimismo, sorprendió ver que el bote de los aguiluchos doblaba a Hondarribia antes de llegar a la ciaboga a pesar de partir un minuto después. El Cantábrico no estaba para bromas y las de la «Ama Guadalupekoa», que sabían perfectamente que sus opciones de clasificación eran nulas, bastante hicieron con completar la regata.

Hibaika también vivió un calvario. Justo al momento de arrancar, un golpe de mar hizo que su embarcación se atravesase hacia babor. Tras mucho penar, realizaron una regata digna, pero en los últimos metros estuvieron cerca de chocar con una Zumaia que llegaba lanzada, ya que otro golpe de mar obligó a las de Orereta a entrar cruzadas en la línea de llegada.

Pasai Donibane se resarce

La nota positiva de la jornada fue ver cómo Pasai Donibane se resarcía de su chasco de 2011. Hace un año, la «Batelerak» optaba a meterse en la regata de La Concha por detrás de Galicia, Getaria-Tolosa y Zumaia, pero una pésima ciaboga las relegó a la quinta plaza, por detrás de la embarcación de Bizkaia.

La trainera sanjuandarra venía con la lección aprendida y, a pesar de la mala mar, realizó una clasificación impecable. Tanto en los dos largos como en la ciaboga, la «Batelerak» se mantuvo en los tiempos de la «Rianxeira» de Galicia, sin cometer errores y asegurando una clasificación que, quién sabe, puede ser el preludio de una posible sorpresa, ya que en algunas regatas Pasai Donibane se ha quedado muy cerca de las dominadoras del remo.

Entre esas dominadoras, la principal de este año es Zumaia. La «Telmo Deun» saltó al agua dispuesta a comerse a quien tuviera delante, y en el transcurso de la regata dobló a Hondarribia y cerca estuvo de superar también a Hibaika. De hecho, la cruzada final de las de Orereta obligó a las zumaiarras a echar el freno, aunque eso no las privó de obtener 15 segundos de renta sobre Getaria-Tolosa.

La «Esperantza» quedó en segunda posición, con diez segundos de ventaja sobre Pasai Donibane y Galicia Rías Baixas. Con la referencia de Zumaia, que bugaba justo por delante, las patroneadas por Olatz Aldalur se limitaron a cumplir el expediente, a la espera de que llegue el domingo y dar el zarpazo, como lo pudieron dar en el Campeonato de Euskadi.

La prueba femenina promete. ¿Habrá nueva ganadora?