El euríbor a doce meses alcanzó en agosto una media mensual del 0,877%, la posición más baja desde que existe este indicador para calcular las cuotas de las hipotecas. Esta caída supondrá un alivio para el bolsillo de aquellos que tengan una hipoteca media y la revisen con la referencia de agosto.

Así, para una hipoteca media de 150.000 euros con un plazo de amortización de 25 años, la cuota pasará de 642,89 euros al mes a 557 euros.

Tras colocarse en julio en el 1,061%, que ya supuso la cota más baja de todos los tiempos, el euríbor vuelve a batir un récord en agosto debido a las perspectivas de contracción de la zona del euro en 2012, lo que abona el terreno para una nueva bajada de los tipos de interés, que actualmente se encuentran en el 0,75%.

De hecho, los expertos pronostican que el BCE bajará de nuevo el precio oficial del dinero hasta el 0,5% antes de que acabe el presente ejercicio, lo que tendrá un impacto directo en el euríbor.

En agosto de 2011, el euríbor se encontraba en el 2,097%, de modo que la reducción experimentada en los últimos meses se traducirá en una bajada de 85,59 euros mensuales o de 1.028,28 euros anuales. El euríbor marcó su máximo histórico en julio de 2008, en el 5,393%, y desde entonces comenzó una escalada bajista que se detuvo en 2010 tras el entonces mínimo mensual del 1,215%.

Beneficios limitados

Aunque la caída del euríbor traerá importantes beneficios a los titulares de una hipoteca, las asociaciones de consumidores quieren matizar este punto y recuerdan que también habrá muchos ciudadanos que no se beneficiarán de esta bajada, ya que sus hipotecas cuentan con suelos, es decir, niveles mínimos de interés que normalmente oscilan entre el 2% y el 3%.

Por otro lado, el analista de IG Markets Daniel Pingarrón recalca que las bajadas de interés del BCE benefician claramente a los usuarios de un crédito hipotecario ya firmado, al reducir la letra mensual e incrementar su dinero disponible. Por el contrario, advierte de que no contribuyen a reactivar la circulación de nuevo crédito para la compra de vivienda.

De hecho, el número de hipotecas constituidas sobre viviendas en el Estado español sufrió un desplome del 25% en el mes de junio respecto al mismo período del año anterior.