Miembros del comité de empresa de Policlínica Gipuzkoa se concentraron ayer en Donostia, en la sede de la Kutxa en la que Ignacio Gallo, presidente del consejo de administración del centro sanitario, impartía una conferencia.

Los trabajadores protestaban por los 28 despidos en Policlínica, que la dirección justifica por «una persistente caída de los ingresos que arrastra desde 2009», mientras que los empleados los achacan a la mala gestión de la dirección. Desde el comité, en el que temen que la situación puede empeorar, denuncian que los responsables del centro han aprovechado la aprobación de la reforma laboral para que los despidos le resulten más baratos a la empresa y los califican de «calculados y premeditados».

Asimismo, critican que mientras se «recorta empleo para ahorrar 200.000 euros, las dietas de la dirección han crecido en 94.000 euros y los honorarios médicos de los accionistas en 344.000».