Detienen en Galiza a cuatro personas a las que imputan la comisión de sabotajes
Cuatro personas a las que fuentes policiales imputan la comisión de varios sabotajes han sido detenidas en las últimas horas en Galiza en el marco de una operación contra el indepentismo gallego.GARA | SANTIAGO DE COMPOSTELA
La detención en la madrugada de ayer de dos personas en Vigo eleva a cuatro los arrestos que fuentes policiales vinculan a la organización Resistencia Galega llevados a cabo en las últimas horas por la Policía española y la Guardia Civil en Galiza, en el marco de una operación relacionada con sabotajes contra sedes del PP y repetidores de radio y televisión y que sigue abierta.
El Ministerio del Interior informó de que el sábado por la tarde en Vigo la Policía española detuvo, «en posesión de explosivos», a C.C.V. y X.R.O., presuntos miembros de Resistencia Galega. Horas después, la Guardia Civil arrestó a D.S.M. y H.J.M.G. Según las mismas fuentes, planeaban un atentado «inminente».
La versión policial señala que en el momento de su detención, C.C.V., que se había trasladado en autobús a Vigo con una mochila «de notables dimensiones», entró en contacto en el parque de Castrelos de la ciudad con X.R.O. Tras dejar la mochila en un coche aparcado en la zona, según Interior, ambos abandonaron el lugar caminando y fueron detenidos, ante la sospecha de que se tratase de «una entrega de material explosivo» y dado que en el parque había muchas personas.
Efectivos del Grupo de Desactivación de Explosivos confirmaron, según esta versión, la existencia de dos artefactos «de considerable potencia y un acabado mucho más refinado y perfeccionado» que los intervenidos en las detenciones del 30 de noviembre de 2011.
En los registros policiales posteriores, las fuerzas de seguridad españolas dijeron haber intervenido «numerosa documentación y material informático».
Interior recordó que el 6 de agosto la organización Resistencia Galega reivindicó un sabotaje contra repetidores de radio y televisión y agregó que la investigación determinó la implicación de los detenidos. Cree que estos podrían suponer «un relevo orgánico» en la reorganización de la estructura operativa de Resistencia Galega en la zona de Vigo, que consideraba desmantelada tras las detenciones de 2011.