Mikel Albisu y Xabier Zugarramurdi presentaron ayer su libro, «Bidasoa, la senda de los contrabandistas», trabajo que une historia y deporte. Historia, porque en esa zona de Euskal Herria el contrabando era esencial, un empleo para muchos, ya que la proximidad a las fronteras ofrecía la posibilidad de traficar con materias primas y demás enseres.

Pero en este libro también es importante el deporte. Según sus autores, ofrece la posibilidad de conocer un lugar como el Bidasoa mediante un producto turístico que es, por otra parte, «exigente» respecto al nivel físico que requiere.

A fin de cuentas, se trata de una guía que nos descubre los caminos utilizados por los contrabandistas para ocultarse en los bosques donde avanzaban por la noche sin que nadie les viera para conseguir hacer llegar a un lado y otro de la frontera lo que hacía falta.

«Bidasoa, la senda de los contrabandistas» ofrece la posibilidad de realizar ese recorrido a pie o en bicicleta de montaña dividiendo el kilometraje en varias etapas. En el caso de que decidiéramos hacerlo a pie, propone un recorrido de 176 kilómetros en siete etapas en las que se superarán los 9.000 metros de desnivel. En BTT la cantidad de kilómetros aumenta a unos 210 y pueden realizarse en cuatro o siete etapas.

Para que eso sea posible, han puesto en marcha una red de albergues que están señalizados con una marca especial -KB- y han tomado el compromiso de seguir un protocolo con los clientes interesados en realizar el recorrido de los contrabandistas. Las reservas se pueden hacer en la web www.kontrabandistak.com, así como descargarse información.