El grupo de representantes sindicales que se concentró frente a la sede de Osakidetza trató de entrar en el edificio para entregar a la dirección de Osakidetza un escrito con doce medidas para evitar la aplicación de los ajustes aprobados por el Gobierno español en materia laboral, aunque no se les permitió la entrada.

En este sentido, la portavoz de los concentrados, Edurne Aguirre, acusó al consejero Rafael Bengoa y a los directivos de Osakidetza de «mentir» cuando dicen que «no se van a aplicar los recortes en la Comunidad Autónoma Vasca porque la realidad es que se están aplicando desde hace tiempo».

Aguirre les acusó de «tratar de ganar tiempo ante las elecciones» y anunció que su sindicato «no va a consentir» que se desarrollen «las últimas medidas impuestas desde Madrid porque son absolutamente salvajes y desproporcionadas».

Por ello, reclamó al Departamento de Salud que «se plante» ante los recortes impulsados por el Gobierno de Mariano Rajoy y que se deje de «excusas y falsos discursos».

Además, Edurne Aguirre hizo un llamamiento a los usuarios y trabajadores de Osakidetza para que «defiendan el sistema de salud público para que siga siendo universal y gratuito».

A los trabajadores les instó a «organizarse y pelear» en los centros de trabajo y a secundar la huelga general del 26 de setiembre convocada contra los recortes sociales y laborales y para reivindicar que en Euskal Herria «sí hay alternativa».