TITIN III-MERINO II 22

BENGOETXEA-BEGINO 8

Con 20 años de profesional, podría pensarse que pocos o ninguno deben ser los retos que le quedan por cumplir a Titín III. Sin embargo, en plena celebración por esa efeméride e inmersos en el apogeo de la pelota riojana, el de Tricio está a solo un paso de completar una hazaña con un sabor especial; encadenar las victorias en el Parejas y en la feria de San Mateo, con el aliciente de hacerlo además con otro pelotari de la tierra.

Después de todo lo sufrido el miércoles, con espectacular voltereta ante Gonzalez-Zubieta en un Adarraga casi en llamas, el pase a la final lo consiguieron mucho más fácil de lo esperado, quizá hasta demasiado, en un partido de muy poca historia.

Prácticamente desde el primer pelotazo, los colorados recordaron a la pareja que se proclamó campeona, mientras que los de Asegarce estuvieron muy lejos de su verdadero nivel.

A años luz del juego exhibido durante gran parte del verano, el delantero de Leitza tuvo un día aciago, de esos para olvidar, con 9 pelotas falladas. Los dos resbalones en los que ni siquiera llegó a tocar la pelota pueden resumir perfectamente lo vivido por los de Asegarce.

Quejas con el material

Sin esconder en ningún momento la superioridad de sus rivales, que fueron netamente mejores, Oinatz Bengoetxea se quejó amargamente del material empleado por los pelotaris de Aspe al término del partido.

«Mientras ellos se han estado quejando todo el verano por el material, yo he estado callando pero ha llegado el momento de decir algo. Sus pelotas parecían dos corchos, de aficionados, sin nada de toque, tan poco que una hasta se ha torcido».