HACIA LAS ELECCIONES DEL 21-O
Mintegi plantea «tolerancia cero con la injusticia social»
La aspirante a lehendakari por EH Bildu defiende «plantarse contra la deuda y pedir responsabilidades». Reclama virar 180 grados un sistema que «económicamente es un desastre y humanamente, una tragedia»
R.S. | DONOSTIA
«Tolerancia cero contra la injusticia social» fue uno de los compromisos expuestos por Laura Mintegi anoche en el nuevo programa ``Euskadi pregunta'' de ETB. La aspirante a lehendakari por EH Bildu salió muy airosa de casi hora y media de preguntas del público y los internautas, sobre las temáticas más variadas y, en ocasiones, casi anecdóticas. A Mintegi, primera invitada a este nuevo programa, se le reclamó opinión sobre los dos presumibles temas troncales de la campaña -la crisis y la resolución del conflicto-, pero también sobre las relaciones con EEUU, la prostitución, la marihuana, los museos, San Mamés y Anoeta... En total, más de 35 preguntas, de las que ninguna se quedó sin respuesta cumplida.
En la que suponía su presentación en sociedad como aspirante a lehendakari ante una audiencia de masas,Mintegi destacó en el capítulo socioeconómico. De entrada, dejó claro que precisamente por la gravedad de los datos macroeconómicos es imprescindible intentar buscar salidas «con todos. Hay que pensar como país y pensar como estadistas. La gente está harta de peleas entre partidos y lo que quiere son soluciones».
A partir de ello, reivindicó «tomar decisiones aquí» porque, según manifestó, es ahora donde más clara está quedando la dependencia respecto a Madrid, y desde allí «cada viernes nos viene un decreto que dice que hay que quitarles a los pobres para dárselo a los ricos».
Yendo de arriba a abajo, Laura Mintegi se mostró muy contundente con la cuestión de la deuda, de la que dijo que a estas alturas «es impagable. Hay que plantarse y pedir responsabilidades». Citó lo ocurrido en Islandia, en contraposición con la realidad diaria en Grecia, y calificó de «obsceno» el sistema.
Es ahí donde añadió que hay que cambiar el modelo 180 grados, comenzando desde ya y haciéndolo desde Euskal Herria. Defendió la igualdad de oportunidades para todos o la tarjeta sanitaria universal, censuró la subida de las tasas y los recortes en sanidad y educación. «Pero sí hay donde recortar -matizó-; hay infraestructuras que no sirven para nada».
En paralelo, Mintegi apostó por el reparto de la riqueza y el empleo, y en este punto concretó que son inaceptables ratios mayores de 12 a 1 entre los sueldos más altos y más bajos, «porque ahora son del 200 a 1 e incluso más».
Varias preguntas versaron sobre la clase política en concreto. Cuando a Mintegi se le preguntó si estaría dispuesta a implantar un código ético, recordó que Bildu ya se ha rebajado sueldos, ha hecho declaraciones de patrimonio antes de entrar... «Quienes se dedican a la política no tienen que tener ningún privilegio, sino lo contrario; están para servir, no para servirse», afirmó la aspirante a lehendakari.
Dialogar para resolver
Al igual que hizo en el capítulo económico, Laura Mintegi incidió en que se necesita diálogo para cerrar el conflicto y normalizar la situación política. Repasó los puntos de Aiete para incidir en que la pelota está en el tejado de los gobiernos toda vez que ETA ha manifestado su afán de hablar. Añadió que falta también diálogo político y que su disposición para ello es total.
Preguntada sobre las víctimas del conflicto, Laura Mintegi remarcó que los partidos agrupados en EH Bildu reconocen su existencia y que ese es el primer paso para avanzar. Evocó en este punto la iniciativa de Glencree como prueba de que esa reconciliación es posible. Y subrayó ahí el concepto de que «la paz no se construye `contra' nadie, se construye `con'».
En cuestiones sectoriales como el «puerta a puerta» o el llamado «metro» de Donostialdea, Mintegi defendió el criterio general de que sean los afectados directos quienes decidan. Del TAV dijo que «hay que repensarlo, tiene un coste impresionante -500 millones de euros este año que sabríamos enseguida dónde gastar- y no hay ninguna garantía de que siga adelante, no lleva a ninguna parte». En cuanto al problema de la vivienda, abogó por potenciar el alquiler y por combatir la actual situación en la que hay bancos que se están convirtiendo en auténticas inmobiliarias.
Mintegi también tuvo que negar cosas publicadas, como que pretenda cerrar ETB-2: «¿Cómo voy a pensar yo en eso si he denunciado el cierre de medios viajando por todo el mundo?»
El coordinador de la campaña electoral del PSE, Rodolfo Ares, criticó ayer al presidente del PNV, Iñigo Urkullu, por decir que, si vence en las elecciones autonómicas del 21 de octubre, su formación «recuperará el tiempo perdido» en la construcción del tren de alta velocidad (TAV).
En un acto electoral celebrado en la localidad de Castro Urdiales (Cantabria), el exconsejero de Interior, que se presenta en las listas del PSE por Bizkaia, señaló que Urkullu tratará de recuperar «el tiempo que se perdió cuando ellos, por su pacto con la antigua Batasuna, paralizaron el proyecto durante mas de un año», allá por 1999. En este sentido, Ares remarcó que quienes han recuperado «el tiempo perdido» en la construcción del TAV a su paso por la CAV han sido los miembros del Ejecutivo de Patxi López. «Cuando llegamos al Gobierno, únicamente había un tramo en marcha de la línea guipuzcoana. [...] Hoy, tres años y medio después, todos los tramos han sido adjudicados y diecisete de ellos, el 77% del total, estarán en construcción a finales de este año», subrayó. GARA
El presidente del Gipuzkoa Buru Batzar (GBB) y cabeza de lista del PNV por el citado herrialde, Joseba Egibar, señaló ayer que en los comicios autonómicos del próximo 21 de octubre los guipuzcoanos «tienen la oportunidad de lanzar una señal clara a Bildu para decirle que así no se gobierna».
Egibar, que ayer compareció en Donostia junto a los portavoces jeltzales en las Juntas Generales de Gipuzkoa y en el Ayuntamiento de la capital guipuzcoana, Markel Olano y Eneko Goia, señaló que, a su parecer, la ciudadanía, incluyendo a quienes decidieron votar a la coalición abertzale, «está viendo cosas que no les gustan en su forma de gobernar». En este sentido, el candidato jeltzale destacó que Bildu «gobierna desde el eje de la imposición, sin aceptar más realidad que la suya».
En cuanto a la posibilidad de promover una moción de censura contra el Ejecutivo de Martin Garitano, Egibar señaló que «es la voluntad de la mayoría quien quita y pone» a los personas en las instituciones. Ese justo es el motivo por el que la coalición ostenta la Diputación de Gipuzkoa, ya que el 22 de mayo de 2011, cuando se celebraron las elecciones locales y forales, los partidos que integran Bildu obtuvieron 22 junteros, mientras que el PNV solo logró 14 escaños.
Por ello tal vez, en vez de presentar una moción para expulsar a Garitano de la institución foral, Egibar avanzó que su formación tiene «asumida» su posición política en las JJGG de Gipuzkoa, donde considera que realiza una «oposición constructiva, responsable y alternativa».
Por su parte, Olano aprovechó su intervención para criticar la implantación del nuevo Impuesto sobre la Riqueza. Según explicó la agencia Efe, el portavoz jeltzale explicó ante los medios presentes que la nueva tasa es «una reforma de Impuesto de Patrimonio, basada en un cambio de denominación muy populista y de claro tinte electoralista».
Además, tras criticar la labor de Bildu en la Diputación, Egibar cargó contra las medidas adoptadas por el actual lehendakari, Patxi López (PSE), al que acusó de no convocar el Consejo Vasco de Finanzas (CVF) para no dar a conocer la situación del Ejecutivo autonómico. «Este gobierno languidece. No se gobierna, no se lidera, se está en el poder», añadió.
Lejos de Donostia, en Gasteiz, el portavoz del PNV en las JJGG de Araba, Ramiro González, alertó del afán «centralizador» de la Diputación alavesa, en manos del PP. En una rueda de prensa, González cargó contra el partido derechista por querer acabar con las cuadrillas del herrialde. «Queremos decirle al PP que nos va a tener en frente si se mantiene en su intención de acabar con nuestras cuadrillas», sentenció. GARA
