Los ayuntamientos de Bidarte y Larraine han pedido a París el reconocimiento de catástrofe natural por inundaciones. En la localidad de la costa labortana la riada ocurrió durante la noche del 26 de octubre. En la de Zuberoa la demanda llega después de las inundaciones registradas el pasado 19 de octubre.

En la noche del pasado viernes, las fuertes lluvias colapsaron las canalizaciones y las fosas provocando inundaciones en Bidarte. Cuarenta casas y apartamentos se vieron afectados. Una fuerte tromba de agua inundó en muy poco tiempo las residencias de las zonas de Ihartea y Contresta, así como los alrededores del río Uhabia.

El Consistorio está procediendo al inventario de los daños. Para ello, solicita a los habitantes que hayan tenido problemas directamente relacionados con las lluvias que se pongan en contacto con el Ayuntamiento.

Por su parte, el municipio de Larraine ya formuló el 24 de octubre la petición al Estado del reconocimiento de catástrofe natural por las inundaciones ocurridas el 19 del mismo mes, que también afectaron al nordeste de Nafarroa Garaia. «Las fuertes lluvias causaron grandes daños. Se llevaron vallas y heno, y trajeron rocas y mucho barro», comentó la trabajadora municipal Maryse Acoceberry.

Los más afectados han sido cinco agricultores. «Teniendo en cuenta lo ocurrido, los gastos de reparación son demasiado grandes para los campesinos y es por ello que hemos pedido la declaración de catástrofe natural», puntualizó Acoceberry. Si el Ministerio francés de Agricultura lo acepta, recibirán una ayuda del 30% de los gastos de reparación del Fondo de Calamidad Agrícola.