Gipuzkoa aprobará el Impuesto sobre la Riqueza con el apoyo de PSE y Aralar
El Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas que promueve la Diputación de Gipuzkoa saldrá adelante después de que el PSE anunciase ayer que respaldará el proyecto de norma foral que lo regula, aunque tratará de introducir cambios. Aralar también lo apoya.
GARA | DONOSTIA
La diputada de Hacienda de Gipuzkoa, Helena Franco, acompañada por los directores forales Xabier Olano e Itziar Miner, compareció en la Comisión de Hacienda de las Juntas para presentar el proyecto de norma foral que regula este impuesto, por el que la Diputación prevé ingresar 44,64 millones de euros, lo que supondría un incremento de 8,7 millones y un 24,4% respecto a los 35,87 millones recaudados en 2011 por el Impuesto de Patrimonio.
El IRGF mantendrá el mismo límite exento que el de Patrimonio, 700.000 euros, y también la exención de 300.000 euros de la vivienda habitual, aunque incluirá los bienes y derechos vinculados a actividades económicas, hasta ahora exentos, y eliminará el llamado «escudo fiscal» que establecía un techo de pago en el de Patrimonio.
El nuevo impuesto, que ya fue aprobado el 16 de octubre por el consejo de diputados, deberá ahora superar su último trámite en las Juntas Generales, donde tendrá el apoyo del PSE, según anunció ayer su portavoz, Rafaela Romero.
Romero precisó, no obstante, que su grupo presentará enmiendas al proyecto de norma foral que, según aseguró, «se acerca» a la propuesta que ya realizó el Ejecutivo de Patxi López.
La dirigente del PSE afirmó que en estos momentos no se trata de «subir impuestos sino de restablecer la presión fiscal» porque en la política «además de la transparencia debe primar la coherencia».
Helena Franco fue la encargada de detallar los diferentes aspectos de este impuesto, que aumentará el número de contribuyentes un 14% e incrementará la riqueza sujeta a gravamen desde los 10.409 millones de 2011 hasta los 14.235, es decir, en 3.826 millones.
Oposición
El portavoz del PP, Juan Carlos Cano, consideró «injusta» la denominación del impuesto, dado que el límite exento para la vivienda habitual se establece en 300.000 euros pese a las fluctuaciones históricas de precios, al tiempo que se hizo eco del malestar de las empresas que se sienten «una vez más, castigadas con una nueva imposición».
La juntera del PNV Itziar Agirre expresó sus dudas respecto a diferentes cuestiones del impuesto relacionadas con su afección a las pymes y defendió la armonización fiscal vasca en el Órgano de Coordinación Tributaria. La directora foral Itziar Miner le respondió que la Diputación trató de buscar el consenso entre los tres territorios aunque fueron otros los que no mostraron ningún interés.
Helena Franco destacó ayer la unanimidad en la Comisión de Hacienda para potenciar la lucha contra el fraude fiscal, aunque los partidos de la oposición no han mostrado aún su apoyo al registro de contribuyentes de «especial riesgo» que impulsa la Diputación.