Después de tantos tropiezos, ya no se puede tolerar ni uno más. «Siempre decimos que hay tiempo, pero hay que empezar a ganar partidos ya», afirmaba Dusko Ivanovic tras la inesperada derrota del Caja Laboral Baskonia ante el Cedevita Zagreb. La escuadra baskonista ocupa la última plaza del grupo C, así que toca sumar o empezar a despedirse de la Euroliga.

Así las cosas, la derrota ante el Olympiacos no es una opción que se plantee siquiera, por mucho que el cuadro heleno sea el vigente campeón continental. «Perder en Zagreb fue una gran decepción porque nadie se lo esperaba, así que ahora estamos obligados a ganar», reconocía Fabien Causeur.

«Si queremos aspirar al Top 16 tenemos que ganar. No hay más tiempo de espera ni al próximo partido ni a la próxima final. Solo vale la victoria», por encima incluso del basket average, aunque el Baskonia caía por una desventaja remontable, 85-81, en Grecia en el estreno continental.

«Es un equipo con mucha calidad, que corre muy bien y que viene con confianza», explicaba un Ivanovic que volvía a recalcar que «su juego se sigue basando en el equipo del año pasado, con un líder que encuentran en los momentos en los que no saben qué hacer. Tienen unos ala-pívots que juegan muy bien y los aleros se aprovechan muy bien de las ayudas que recibe Spanoulis».

Puesta en escena

«No tengo ninguna duda de que mi equipo va a estar muy bien», afirmaba Dusko Ivanovic, pero reconocía que «desde el principio siempre tenemos algunos momentos de lagunas. Todavía no tenemos esa continuidad». Esa irregularidad es lo que más preocupación despierta entre los seguidores baskonistas.

En lo que a las bajas se refiere, aunque en principio la plantilla esté en disposición de jugar, parece que Ivanovic le seguirá dando descanso a Nemanja Bjelica. «Creo que no va a jugar. Todavía tiene molestias», comentaba el técnico gasteiztarra.