Carlos Bilardo, sí, el técnico argentino del famoso «¡Písalo, písalo!», era capaz de quemar la bandera de Argentina en vísperas de un partido para lograr un sentimiento de ofensa patria entre los jugadores y arrancar motivaciones extras. No sabemos cuál será la arenga de su compatriota Marcelo Bielsa en los prolegómenos de pisar esta noche el césped del Santiago Bernabéu, pero seguro que el rosarino habrá tenido que echar mano de su sicología para estimular a un grupo que, además de en el juego, también anímicamente notará la ausencia de Herrera y De Marcos, además de la del `dudoso' Amorebieta.

Y es que acudir al coliseo merengue con la baja de tres pilares del equipo es como para echarse a temblar, de ahí que, quien más, quien menos, entre la afición, tenga sus expectativas puestas más en el choque europeo del jueves y, si me apuran, en el partido ante el Deportivo en San Mamés, que en lo que suceda hoy en Madrid.

Tablero de ajedrez

Lezama ha sido esta semana un tablero de ajedrez sobre el que el `maestro' Bielsa ha movido piezas hasta dar con un once que le ofrezca garantías. Y ese pasa por confiar en el recuperado Ekiza y en San José para el eje de la zaga, una pareja de `torres' que solo ha coincidido una vez este curso en partido oficial, ante el HJK Helsinki, en tierras finesas. Por delante de ellos avanzará, cual `caballo', el capitán Gurpegi, que hará las veces de Iturraspe, mientras el `alfil' de Abadiño dará un paso al frente para hacer de Herrera, y el `peón' Muniain deberá moverse como De Marcos. En banda Bielsa volverá a confiar en Ibai, junto a Susaeta y Aduriz.

«Ojalá que acierte en la decisión», dijo en enero pasado Bielsa cuando el Athletic visitó al Madrid y situó a San José de central y a Amorebieta en el lateral izquierdo; cayeron 4-1. «Tener la pelota y atacar», anunció entonces en la previa. «Respetamos al Madrid, pero queremos dejar marcada nuestra presencia», rebajó su tono ayer. Esperemos que haya más suerte que las últimas tres temporadas: 4-1, 5-1 y 5-1 fueron los marcadores.

«Jugarla y no perderla»

Más músculo en la medular y seguramente pérdida de profundidad arriba, sin De Marcos. Será otra prueba de fuego para un Iker Muniain que querrá reivindicarse tras las críticas recibidas esta semana por su comportamiento sobre el verde.

¿Con qué actitud saldrá el equipo a enfrentar al Real Madrid? «Las compensaciones que dan las características de los jugadores que van a jugar no implican abandonar la forma de jugar», vino a explicar el técnico para negar cualquier planteamiento `amarrategi' en el Bernabéu, obligado por los cambios. Es más, al ser cuestionado por la peligrosidad de los madridistas al contrataque, aprovechando las habituales pérdidas de balón de los suyos, aclaró que «siempre intentamos jugar y es difícil para nosotros no perder el balón. La forma más habitual para no perderlo en el centro del campo es no pasar por él, pero lo que hay que hacer es lo más difícil, jugarla y no perderla; de eso se trata el fútbol».

El preparador argentino reconoció que los leones deberán tener puesto un ojo en el partido y otro en un Ronaldo que sabe lo que es hacerle goles y unos cuantos al Athletic. ¿Vigilancia especial? «Intentaremos que los caminos que él recorra los encuentre dificultosos», contestó.

Contra el portugués, contra Di María, Benzema y compañía, contra las estadísticas -desde la temporada 1999-2000, los bilbainos solo han ganado una vez allí-, contra las expulsiones y los penaltis -«trataremos de no merecer decisiones arbitrales definitorias», se refirió a ello Bielsa en su habitual lenguaje-...

El Athletic tiene hoy una misión casi imposible en el feudo blanco, pero es evidente que rascar allí algo positivo e, incluso, dar una buena imagen -sin salir goleados-, multiplicaría las expectativas en torno al equipo y apuntalaría esos brotes verdes que ha empezado a dejar ver.