Los vecinos de Sakana podrán decidir cómo se articula el nuevo sistema de recogida de basuras, que tiene el compostaje y la recogida selectiva puerta a puerta como ejes principales, según destacaron ayer en Iruñea el presidente de la Mancomunidad de Sakana, Aitor Karasatorre, y el gerente de esta institución, Adolfo Araiz.

De este modo, ayer se puso en marcha un proceso participativo para que los vecinos puedan decidir distintos aspectos y se prevé que para marzo pueda estar operativo el nuevo sistema.

«Es un sistema propio de Sakana para Sakana», destacaron Karasatorre y Araiz, que subrayaron que la decisión de implantarlo corresponde a motivos técnicos. De hecho, la Mancomunidad de Sakana lleva dos años estudiando distintas alternativas para poder cumplir las exigencias de las normativas europea, española y navarra, que establecen que se alcance un 50% de recogida de orgánicos con un nivel de impropios -residuos que no entran en esta categoría- menor del 10%.

Actualmente, en Sakana este porcentaje es del 25% y se estima que con el nuevo sistema se puede alcanzar el 80%, con un nivel de impropios del 2%. Los estudios de la Mancomunidad de Sakana dejan en evidencia que con el quinto contenedor para materia orgánica, la alternativa a la recogida selectiva puerta a puesta, no se alcanzarían los niveles exigidos por la normativa.

Para ello, junto a la recogida selectiva puerta a puerta, en Sakana han hecho una apuesta decidida por el compostaje y al autocompostaje para eliminar al máximo la fracción orgánica. Actualmente, son 319 las viviendas que compostan sus residuos orgánicos, pero se estima que pueden ser hasta 2.8000 las que podrían hacerlo en Sakana puesto que cuentan con las condiciones para hacerlo. Asimismo, se prevén zonas para compostaje comunitario.

En los pueblos y concejos de menos de 300 habitantes, la apuesta por el compostaje llevará a que la Mancomunidad dejará de recoger el residuo orgánico, que será compostado en su totalidad en estas localidades.

Se estima que en Sakana se puede reducir los residuos restos de 7.500 toneladas al año a solo 2.000.

Los vecinos de Sakana podrán, por su parte, decidir cómo se pone en marcha el nuevo sistema. Así, no está todavía decidido si se instalarán postes en las calles para colgar los cubos o si se establece otro método. «Lo de los postes fue una solución que adoptaron en Usurbil, pero eso no quiere decir que en Sakana se opte por la misma solución», explicó Araiz.

Otra de las cuestiones que decidirán los vecinos será si la materia orgánica se deposita directamente en los cubos o si se emplean bolsas compostables. Cada opción tiene sus pros y sus contras. Las bolsas evitan olores y lixiviados, pero encarecen el proceso.

Junto a ello, debe decidirse cómo se organizan los puntos de emergencia para atender a aquellos que por motivos laborales o de otra índole no puedan dejar su basura en los puntos y horas establecidos.

La Mancomunidad también mantendrá contactos con comercios y establecimientos de hostelería para organizar la recogida y las frecuencias están asimismo sin definir.

Todas estas cuestiones se decidirán en el marco del proceso participativo que ayer puso en marcha la Mancomunidad de Sakana. Para ello, han habilitado distintos recursos en Internet (redes sociales y un blog específico) y pondrán en marcha tres oficinas de información en Irurtzun, Etxarri-Aranatz y Olatzagutia o Altsasu, además de en la sede de la Mancomunidad en Lakuntza. Junto a ello, un autobús recorrerá otros pueblos.

Karasatorre y Araiz destacaron que el nuevo sistema supondrá un importante ahorro para los vecinos de Sakana, cifrado en una reducción del coste global (recogida y tratamiento) de 61.000 euros. En este aspecto, Araiz criticó que el sistema de tasas de tratamiento de residuos en Nafarroa, -excluyendo a Iruñerria- ya que todas las mancomunidades pagan lo mismo al margen del nivel de reciclaje que tengan. «No se puede dejar de valorar el esfuerzo que hacen los ciudadanos», subrayó el gerente de la Mancomunidad de Sakana, que abogó por un sistema de pago en función de la generación.

El ahorro que permitirá el nuevo sistema hace que la Mancomunidad de Sakana se plantee la posibilidad de rebajar las tasas a los vecinos, según señaló Araiz.

Junto a ello, el presidente y el gerente de la Mancomunidad de Sakana destacaron que el nuevo sistema permitirá también la creación de nuevos puestos de trabajo. Siete personas están trabajando durante la campaña de participación y está previsto que a largo plazo se consoliden entre tres a cinco puestos.

Karasatorre subrayó la importancia de que se creen puestos de trabajo en una comarca tan azotada por el paro como Sakana y recordó que los informes de la UE señalan que el reciclaje de residuos es una actividad propicia para la creación de empleo.

El presidente de la Mancomunidad criticó a la oposición del Ayuntamiento de Altsasu por aprobar una moción en la que reclaman una consulta. «Nos ha sorprendido porque no han participado en las asamblea y no sabemos qué quieren preguntar», señaló Karasatorre, que instó a que permitan a los vecinos de Altsasu participen en el proceso informativo.