Hallan los cuerpos del matrimonio desaparecido mientras pescaba
Un helicóptero localizó ayer cerca del Superpuerto de Bilbo los cuerpos sin vida de Ángel Díez y Amada Alonso, un matrimonio basauritarra residente en Castro. Un amplio dispositivo los buscaba desde el sábado, después de que desaparecieran mientras pescaban en Allendelagua.
GARA |
Los cuerpos sin vida de Ángel Díez y Amada Alonso fueron localizados ayer por la tarde a 150 metros del espigón del Superpuerto de Bilbo, según informaron a Europa Press fuentes del Gobierno de Cantabria. El matrimonio era natural de Basauri, y tenían fijada su residencia en Castro Urdiales. Ambos desaparecieron el sábado mientras pescaban en la zona de acantilados de Allendelagua
Un amplio dispositivo de rescate trabajó durante la jornada de ayer por mar, tierra y aire, en la búsqueda de este matrimonio que desapareció el día anterior en el antiguo vertedero de Allendelagua, donde se encontraban pescando. Finalmente, los cuerpos sin vida fueron avistados sobre las 17.30 por un helicóptero del 112 de Cantabria.
La voz de alerta la dio sobre las seis de la tarde del sábado una persona que cuando paseaba por la zona, vio a dos perros en la parte inferior del acantilado, además de una chaqueta, y utensilios de pesca.
Inicialmente se pensó que era una sola la persona desaparecida, el esposo, pero después de ir «atando cabos», los equipos de rescate trabajaron ayer con la «hipótesis» de que los dos se fueron juntos a pescar, y que una ola pudo llevárselos, o bien que se llevó a uno y el otro se tiró al agua para intentar rescatarle. De hecho, un testigo declaró que vio a dos personas pescando en la zona.
A través de los datos del coche del matrimonio, que se encontraba aparcado en las inmediaciones del acantilado, se localizó su domicilio y se pudo contactar también con sus hijos, que no tenían llaves de la vivienda. Pasadas las 21.30 horas, la Guardia Civil, acompañada por efectivos del Cuerpo de Bomberos de Castro y de la Dya, entraron en la vivienda, donde en un principio creían que encontrarían a la esposa.
Las mismas fuentes señalaron que en la casa no localizaron a nadie, aunque la cartera y el teléfono de ella estaban allí. Este extremo hizo pensar que ambos se encontraban juntos.
Las labores de búsqueda, que comenzaron el sábado, se retomaron a primera hora de ayer y en ellas participaron los helicópteros del 112 del Gobierno de Cantabria y de Salvamento Marítimo; mientras que por mar únicamente pudo intervenir Salvamento Marítimo al registrarse olas de tres metros. Por tierra participaron equipos de Protección Civil, Guardia Civil, Policía Local, bomberos y DYA de Castro Urdiales. Protección Civil del Gobierno de Cantabria también habilitó un equipo de sicólogos para atender a los familiares y allegados.
La voz de alerta la dió un paseante la tarde del sábado, tras avistar en la zona baja de los acantilados a dos perros, además de una chaqueta y utensilios de pesca. Un testigo afirmó haber visto previamente a dos personas pescando.