Tel Aviv carga contra los testigos y sigue engrosando la lista de víctimas
Son al menos 72 los palestinos muertos tras cinco jornadas de agresión militar contra Gaza, mientras del lado israelí hay tres víctimas mortales. En lugar de rectificar, Tel Aviv parece dispuesto a agravar la situación y para ello necesita librarse de testigos tan incómodos como los periodistas. Israel tiene en el punto de mira a los medios de comunicación presentes en la ciudad de Gaza. Dos centros internacionales de prensa fueron ayer blanco de sus proyectiles.
GARA |
Dos centros internacionales de prensa fueron ayer blanco de proyectiles lanzados por la marina y la aviación israelíes. Nueve periodistas y trabajadores resultaron heridos. Un fotógrafo perdió una pierna. Mohamed Astal, de la televisión árabe Al Quds, recordaba consternado a Euronews que «todo el mundo sabe que este edificio alberga a periodistas. Está señalizado de forma muy clara para que se sepa que es un centro de prensa. Así que nos quedamos conmocionados cuando esta mañana un proyectil golpeó el edificio. Lo abandonamos rápidamente».
Reporteros sin Fronteras (RSF) condenó los bombardeos israelíes contra diversos medios de comunicación, e insistió en que esas operaciones tampoco son legítimas cuando se dirigen contra «informadores próximos al movimiento Hamas». RSF exigió «el fin inmediato» de esos ataques que han impedido ejercer su trabajo a diversos medios locales e internacionales.
Once palestinos, entre ellos cinco niños y dos mujeres, murieron ayer víctimas de un ataque aéreo israelí sobre una vivienda de cuatro plantas situada en el norte de la ciudad de Gaza. Según comunicó un portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza, otras 30 personas resultaron heridas.
Aviones F-16
Testigos señalaron que dos o tres misiles disparados por aviones F-16 redujeron a escombros el edificio, en el que residía una familia. De acuerdo a medios israelíes, el ataque se dirigía contra un comandante de Hamas, responsable de muchos de los recientes ataques con cohetes.
Fue el ataque más mortal en los cinco días de ofensiva israelí, el que marcó la jornada de ayer, con el que aumentaban a 72 los muertos palestinos.
El brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámico, Hamas, disparó ayer varios cohetes hacia Israel, algunos de ellos dirigidos a Tel Aviv. Al menos cuatro cohetes fueron lanzados contra la capital reconocida internacionalmente. Varias localidades del sur de Israel recibían impactos directos de proyectiles procedentes de la franja, en contraofensiva por los bombardeos israelíes.
Un día después de que fuera desplegada la batería antimisiles Iron Dome o Cúpula de Hierro en el área metropolitana de Tel Aviv, la ciudad mediterránea se convirtió nuevamente en el objetivo de los ataques procedentes de Gaza. A última hora de la tarde las sirenas volvieron a sonar y segundos después las televisiones difundieron en directo las imágenes de dos proyectiles lanzados en dirección al denominado bloque urbano Dan, la zona alrededor de la ciudad. Uno de ellos fue interceptado en pleno vuelo por el sistema antimisiles cerca de Tel Aviv.
En un mensaje enviado por teléfono, Hamas reivindicó la autoría del lanzamiento de los últimos cohetes contra Tel Aviv en «venganza por la masacre de una familia».
El Ejército israelí interceptó por la mañana dos cohetes Fajr, de fabricación iraní, que se dirigían hacia la urbe situada en el corazón económico del país, después de otros ataques similares ayer y el jueves pasado, cuando hicieron sonar las alarmas en Tel Aviv por primera vez en 21 años. Desde el inicio de la operación «Pilar Defensivo» contra Gaza, la resistencia palestina ha disparado más de un millar de cohetes y proyectiles de mortero contra el territorio israelí, 300 de los cuales fueron derribados en vuelo, según el jefe de la Defensa Aérea Activa de Israel, coronel Zvika Haimovitch.
Entretanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que el Ejército de su país está dispuesto a seguir adelante con la ofensiva. «Estamos haciendo pagar a Hamas un alto precio y el Ejército está preparado para ampliar considerablemente la operación», amenazó al inicio del Consejo de Ministros.
Una delegación compuesta por cuatro militares israelíes llegó ayer mismo a El Cairo para tratar con las autoridades de Egipto sobre una posible tregua en la franja de Gaza, informó una fuente de los servicios de seguridad egipcios. Explicó que los militares israelíes entregaron un borrador de un acuerdo de alto el fuego a los servicios secretos egipcios, quienes han mediado en anteriores ocasiones entre Israel y Hamas.
Está previsto que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, llegue hoy mismo a El Cairo para analizar con las autoridades egipcias la situación en Gaza y los esfuerzos mediadores.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, pidió un alto el fuego en la franja de Gaza y advirtió a Netanyahu de que las circunstancias en Oriente Medio han cambiado. «No estamos en el año 2008, estamos en el 2012 y las circunstancias son diferentes. Debe comprender eso», dijo Erdogan en un discurso ante el Foro Empresarial Egipcio-Turco en El Cairo. Erdogan aludía de esa forma a la ofensiva contra Gaza conocida como «Operación Plomo Fundido», entre finales de 2008 y comienzos de 2009, y a las revoluciones que durante el año pasado derrocaron a regímenes dictatoriales en varios países árabes, tales como Egipto.
En su alocución, el primer ministro turco pidió imponer «un alto el fuego de inmediato y rápido en las próximas 24 horas en la franja de Gaza». Además, instó a levantar el bloqueo impuesto por Israel a Gaza, «de manera gradual, para que la región se tranquilice y para que las negociaciones entre ambas partes se reanuden inmediatamente». El jefe de Gobierno turco criticó a las grandes potencias porque solo les interesa «despedazar y desunir al mundo islámico», y acusó a Israel de «practicar terrorismo de Estado en Oriente Medio».
Por su parte, el titular israelí de Defensa, Ehud Barak, dijo en relación a los intentos de mediación para un cese de hostilidades que la ofensiva debe seguir. «Debemos continuar; si es necesario no dudaremos en lanzar una ofensiva terrestre. Haremos todo lo que sea necesario para garantizar que los objetivos de la operación se cumplen», recalcó.
El jefe de la diplomacia israelí, Avigdor Lieberman, afirmó que la primera condición para cualquier acuerdo de alto el fuego con Hamas es el completo cese de todos los ataques con cohetes contra Israel.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, llamó a «intensificar las manifestaciones pacíficas» en contra de la agresión israelí y apeló a la «unidad» de los palestinos.
Los ataques israelíes dejaron ayer 27 muertos en la Franja de Gaza, nueve de ellos niños. Un misil destruyó la vivienda de la familia Al-Dalou en el barrio de Sheikh Radwan en la ciudad de Gaza, matando a diez de sus miembros, entre ellos dos mujeres y cinco niños.