Delegados del sindicato LAB en los aeropuertos de Foronda, Loiu, Noain y Hondarribia comparecieron ayer ante los medios de comunicación para alertar de las graves consecuencias que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en AENA traerá para los trabajadores. En concreto, anunciaron que supondrá la destrucción de 132 empleos en Hego Euskal Herria, al tiempo que advirtieron de que «abre la puerta a su privatización total».

El responsable de Transporte de LAB, David Resines, explicó que los trabajadores de los aeropuertos afectados por el ERE tienen de plazo hasta el final de año para acogerse a alguna de las medidas recogidas en el mismo, como prejubilaciones y salidas incentivadas.

En este sentido, expresó su temor a que, si no se alcanza el cupo de 1.600 trabajadores estimado por AENA, a los empleados no acogidos a ninguna medida se les aplique «movilidad funcional y geográfica» y que, si no aceptan estas opciones, se conviertan en «bajas forzosas».

Foronda se hunde

Especialmente grave es la situación de Foronda, ya que -según los datos aportados por Resines- el ERE prevé el despido de 94 trabajadores de una plantilla de 120, es decir, el 78% de los trabajadores, «lo que supondría a futuro y sin lugar a dudas el cierre del aeropuerto». Ello hace, según la central sindical, que el de Foronda sea «el caso más sangrante».

Ante el incierto futuro al que se enfrentan los trabajadores de los aeropuertos, Resines criticó la actitud de CCOO, UGT y USO porque firmaron el ERE en Madrid «sin consultar» ni con los trabajadores, ni con los sindicatos de los centros periféricos y «sin haber planteado confrontación ni movilizaciones». Al respecto, anunció que LAB emprenderá «acciones contundentes» para impedir la implantación del ERE.

El sindicato abertzale reclamó un marco vasco de relaciones laborales para «legislar y decidir» las políticas en Euskal Herria y pidió compromiso político a los partidos representados en el Congreso español.