El presidente de México, Enrique Peña Nieto, presentó el lunes la estrategia de su Gobierno contra el crimen organizado, que implica la división del país en cinco regiones y la creación de un cuerpo y varias unidades especializadas en la lucha contra los delitos asociados.

Anunció que la lucha contra el crimen organizado quedará a cargo de la Secretaría de Gobernación. Dejó claro también que la nueva estrategia no supondrá el repliegue de las Fuerzas Armadas, y que tanto el Ejército como la Marina seguirán patrullando las calles.

Por otra parte, el exdirigente del PRI Humberto Moreia denunció al expresidente Felipe Calderón ante el Tribunal Penal Internacional por considerarlo un «criminal de guerra» que impuso «un estado de excepción».