El estreno del 23º Mundial fue una jornada dedicada a los actos protocolarios en la sede de Madrid, donde posteriormente se celebró el partido que abría el campeonato, el único que se disputaba ayer.

La selección española se enfrentaba a Argelia, subcampeona de Africa en vísperas de los Juegos Olímpicos, y la paliza en el marcador (27-14, 23-8 en el minuto 45) fue un aperitivo de lo que espera en esta primera semana, en la que se liquida una primera fase con 34 partidos en que se enfrentarán selecciones europeas a las de otros continentes (de los 60 totales), donde las sorpresas serán casi imposibles. Y eso que en principio los equipos africanos son los más fuertes tras los europeos.

Víctor Tomás, con 8 goles (6 de ellos de penalti), fue el máximo goleador de España, mientras el mejor jugador argelino, el pivote Mokrani (jugador del Dunkerque, el único, junto a Boultif, que juega en la Primera División francesa), marcaba 5 para Argelia.

Valero Rivera aprovechó la sencillez del encuentro para repartir minutos entre todos sus jugadores, una práctica que seguramente se repetirá en las dos jornadas siguientes en que España se enfrentará a Egipto y Australia.

El torneo entrará hoy en materia con todos los grupos en liza en las cuatro sedes de esta primera fase (Granollers, Sevilla, Zaragoza y Madrid) para disputar 11 encuentros, en una de las dos únicas jornadas en que se jugará en todos los grupos (la otra será el martes). Los partidos más interesantes de hoy serán el Islandia-Rusia, Polonia-Bielorrusia y, en otro orden, el Argentina-Montenegro.