SEGUNDA B 21ª jornada
Un marcador mejor que el juego refuerza al líder
Un golazo de Borja Viguera resuelve un flojo encuentro y amplía la ventaja del Alavés al frente de la tabla.
SD LOGROÑÉS 0
ALAVÉS 1
GARA | LOGROÑO
Jornada redonda para el Alavés, al menos a nivel de resultados. El equipo albiazul no protagonizó el partido del siglo -el césped de Las Gaunas tampoco estaba para florituras, aunque posiblemente no fue el único motivo-, pero un golazo de Borja Viguera le permitió reencontrarse con la victoria y ampliar su ventaja respecto a sus más inmediatos perseguidores, tras los empates cosechados la víspera por Eibar, Bilbao Athletic y Amorebieta.
Al equipo gasteiztarra le costó más entrar en juego ante un anfitrión que no solo plantó cara, sino que incluso llegó a acorralar al Alavés -con el que ayer debutaron Juanje y Laborda, titulares como Iván Crespo- en el primer tiempo, aunque tras el gol de Viguera se vino abajo. El Logroñés, así, llevó la batuta de inicio. Iñaki Toledo probó con un disparo al área casi desde la línea de fondo que se fue alto. Olabarrieta aprovechó minutos después un error de la zaga blanquiazul -ayer de naranja-, pero Crespo detenía el balón. Sufría el Alavés ante un rival más intenso, con mayor control y dominio del juego. Y que no tuvo suerte porque a los veinte minutos Metola caía lesionado y tenía que abandonar el terreno de juego.
Con el transcurso de los minutos, los alaveses fueron entrando más en el partido ante un Logroñés que empezó a notar el cansancio y diluirse. El peligro albiazul apenas llegaba, con todo, en las acciones a balón parado. Probaba Laborda rematando una falta botada al área, pero Gonzalo estuvo bien.
El empate con que se llegó al descanso hacía presagiar lucha para la segunda parte. La hubo, pero apenas durante diez minutos, los que tardó el Alavés en marcar. Probó Laborda al meta local con un cabezazo y, casi de inmediato, llegaba el único tanto del partido. Viguera recogía un balón en la frontal del área, recortaba a la defensa riojana, driblaba a Gonzalo y anotaba el 0-1, pese al intento del jugador exalbiazul Jon Moya de sacar el balón bajo palos.
A mejor
En ventaja, el Alavés se vino arriba. Nada que ver con el equipo de la primera parte. Volvió a intentarlo Laborda y volvió a frustrar su intento Gonzalo, desviando a córner. En la falta posterior, botada por Juanje, el guardameta rojiblanco tenía que estirarse de nuevo para enviar por línea de fondo. Con el terreno de juego más pesado y con Jaume, Manu García y Beobide asumiendo protagonismo, la única opción para el Logroñés pasaba por los balones en largo.
No le sirvió de nada. El Alavés cerró líneas y aguantó sin excesivos problemas las tímidas llegadas locales. Aunque sí hubo tiempo para la polémica. En el último minuto, los riojanos protestaron airadamente un penalti sobre Olabarrieta, pero solo consiguieron la amarilla por piscinazo para su delantero.
Borja Viguera
El delantero riojano no solo marcó el gol, golazo, del triunfo, sino que trajo por el camino de la amargura a la zaga rival. Ejerció de punta de lanza, supo habilitar a sus compañeros de banda y protagonizó las mejores ocasiones del equipo.