CRíTICA: «Mamá»
Lucha por la custodia de las hijas más allá de la muerte
Mikel INSAUSTI
El mexicano Guillermo Del Toro ha dado esta vez en la diana comercial con una producción independiente, realizada por el debutante argentino Andrés Muschietti. Este se basa en un corto homónimo de tres escasos minutos que rodó en Barcelona, por lo que para desarrollar aquella idea hasta convertirla en un largometraje ha tenido que partir prácticamente de cero. Y es ahí donde los huecos los va llenando la concepción que del fantástico viene desarrollando en los últimos años el hombre que también estaba detrás de «El orfanato», con ese tan característico universo de pesadilla infantil sacado de sus propias realizaciones «El espinazo del diablo» o «El laberinto del fauno».
El sello Del Toro se deja sentir ya desde los títulos de crédito iniciales, filmados sobre unos dibujos en los que las niñas protagonistas describen su historia con inconfundibles toques macabros, remarcados por la partitura del getxotarra Fernando Velázquez. El espíritu heredado de «La noche del cazador» y los cuentos de los hermanos Grimm sobrevuela temática y estilísticamente un arranque prometedor que, sin embargo, va autoconsumiéndose por la sensación de «déjà vu» que se apodera de la narración a medida que avanza en una dirección cada vez más previsible.
La apertura del hallazgo de las niñas perdidas que han sobrevivido cinco años en el bosque, comiendo cerezas, enlaza con el estudio psiquiátrico que hace de su estado mental el Doctor Dreyfuss. Esta parte encierra un potencial sociológico y cultural cercano al del clásico de Truffaut «El niño salvaje», pero pronto queda en evidencia que el trasfondo seudocientífico depende de la enésima supuesta revelación de un fenómeno paranormal. Pero como quiera que aparece provocado por un instinto maternal que va más allá de la muerte, se quiere envolver de un halo poético en cuanto metáfora del amor eterno hacia los hijos por parte de quien les ha dado la vida; solo que las escenas oníricas y el clímax final en el acantilado presentan al fantasma o monstruo materno de modo demasiado explícito.