El Ibex logró recuperar los 8.200 puntos, aunque pudo terminar todavía más arriba de no mediar la incertidumbre sobre el desenlace de las elecciones en Italia. Las bolsas tuvieron un despertar alcista significativo, algo sorprendente por el momento que se vivía en Italia y la pérdida de la máxima calificación crediticia de Gran Bretaña en la escalera de Moody's. Este nuevo descarte ha hecho que el club de la máxima solvencia, que engloba a los estados con notas triple A en las tres grandes agencias de ráting, se reduzca a once miembros, de los que siete son europeos. Así las cosas, el Ibex y el resto de plazas europeas se fueron replegando por la tarde según llegaban noticias de los sondeos que otorgaban protagonismo a Berlusconi en el futuro de Italia. El Ibex, sumido en una gran volatilidad, acabó en los 8.244,50 puntos, tras subir un 0,80%. En su mejor momento se acercó a los 8.400 puntos. El signo fue positivo también en Fráncfort (+1,45%), París (+0,41%) y Londres (+0,31%). En el Ibex, las mayores ganancias correspondieron a ACS (+4,14%), Sacyr (+2,83%) y FCC (+2,53%). En el capítulo de caídas despuntó IAG (-2,81%), que no termina de dar solución a su conflicto laboral. Por detrás terminaron Gas Natural (-1.60%) y Dia (-1,32%). Dentro del grupo de los valores de mayor capitalización, el mejor fue Repsol (+1,96%), mientras que solo BBVA (-0,04%) cerró con pérdidas. Telefónica, Inditex e Iberdrola subieron más de un 1%. En París, Vivendi (+3,20%), Crédit Agricole (+2,72%) y L'Oréal (+1,87%) lideraron las ganancias, frente a Accor (-1,90%), el más castigado de la jornada.