El sector servicios se consolida como «gran refugio» del empleo y ocupa ya al 72 % de la población activa de Bizkaia, según recoge el estudio elaborado por el Observatorio Laboral de este herrialde correspondiente al cuarto trimestre de 2012.

Según subraya la entidad foral, el informe establece que las personas con trabajo cuentan con un alto nivel educativo, con estudios universitarios en el 38% de los casos, en claro contraste con la media estatal, cuya tasa no alcanza el 30%. Asimismo, cuatro de cada diez trabajadores poseen una ocupación técnica o profesional. Este estudio periódico de la Diputación, coordinado por la Catedrática de Economía de la UPV-EHU Sara de la Rica, refleja que en el último trimestre de 2012 había 460.524 personas ocupadas frente a 81.101 sin empleo. De las personas ocupadas, el colectivo más numeroso es el formado por los mayores de 45 años, que alcanzan ya el 43% de la población trabajadora. De todas las personas con empleo en Bizkaia, el 78% posee un contrato indefinido, cifra que se ha visto reducida con respecto al mismo período del año 2011.

El Observatorio Laboral de Bizkaia ha detectado en su informe el incremento del desempleo entre las personas con estudios universitarios, que aumenta del 21 al 27% del total de desocupados, y la subida de la proporción de desempleados de larga duración, del 34 al 45% en el ejercicio 2012.

Más pérdidas en los hombres

Asimismo, el estudio señala que 18.059 personas accedieron a un empleo durante los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2012, de las cuales más de 7.000 procedían del desempleo y otras 10.000 que, hasta ese período del año, no formaban parte de la población activa. Según el informe, 26.465 personas perdieron su empleo en el último trimestre del año pasado. En pérdida neta de puestos de trabajo los hombres superaron a las mujeres en el periodo analizado y esta cifra es más significativa este último año para la franja de edad entre 35 y 44 años. La única categoría para la que el acceso a un empleo supera a la pérdida es para el colectivo de jóvenes menores de 25 años.

«En un contexto de pérdida de empleo en todos los sectores de actividad, las personas sin estudios o con estudios primarios son las que más dificultades tienen para acceder a una ocupación», recalca, para añadir que el número de personas que contaban con empleo fijo y lo han perdido se ha incrementado en el periodo analizado