Maite SOROA | msoroa@gara.net
Curiosa honradez
El Parlamento de Iruñea pedía la dimisión de la presidenta del Gobierno navarro, Yolanda Barcina, por el cobro de dietas, lo que hasta el portavoz del PPN, a pesar de votar en contra, veía reprobable. Sin embargo, los medios de extremo centro aplaudían a la presidenta.
«La Razón» dedicaba en su sección `Las caras de la noticia' una flecha hacia arriba a Barcina porque «La presidenta del Gobierno de Navarra y el ex presidente foral, Miguel Sanz, han anunciado que devolverán las dietas recibidas por asistir a reuniones de Caja Navarra». Pero marcaba distancias: «Un gesto que les honra pero sobre el que cabe preguntarse por qué no lo hicieron antes».
«El Mundo» se refería a ese asunto tan feo en el que está enfangada la derecha navarra y coincidía en los términos al afirmar que «El anuncio de Yolanda Barcina de que devolverá las dietas cobradas por su presencia en órganos consultivos de Caja Navarra es un gesto que le honra». Lo habría sido si en su día hubiera renunciado a esas dietas y hubiera denunciado el cobro de las mismas. Pero cuando que cuando la han pillado pida perdón, y tras ver que no cuela diga que devuelve el dinero ni la honra ni la disculpa. No obstante, el diario de Pedrojota decía a continuación que ese gesto «llega tarde y tras unas explicaciones absurdas al comparar esas dietas con el sueldo de un albañil».
A «Abc» le parecía estupendo y dedicaba una flecha hacia arriba a Barcina y Miguel Sanz. Fíjense hasta dónde llega la cara dura y el convencimiento de que la gente necesita algo más voluminoso que una rueda de molino para comulgar: «No solo han pedido perdón por haber cobrado unas suculentas dietas por asistir a reuniones de Caja Navarra sino que han anunciado que devolverán el dinero percibido». Y para «Abc» son modelo a seguir: «Aún hay esperanza en la política». En la información interior nos lo explicaba: «Nada de lo ocurrido se entendería si no se tiene en cuenta la tensa lucha interna que existe en PPN ante el congreso que se celebrará el próximo domingo». Ah, claro. Y más aun con la aclaración, con culpable incluido, que llegaba después: «las informaciones sobre el cobro abusivo de dietas por parte de dirigentes de UPN surgen desde el ámbito abertzale diez días antes de la celebración del congreso con la intención de desestabilizar al partido regionalista y, por ende, al Gobierno de Navarra». Ya, pero las informaciones eran ciertas, ¿no?