El temporal obliga a cerrar la planta nuclear de Sellafield por «precaución»
El fuerte temporal que azota las islas británicas ha obligado al cierre «controlado» del complejo nuclear de Sellafield como medida de «precaución», ante las dificultades de acceso de su personal, aunque sus responsables aseguran que su seguridad está garantizada.
GARA | LONDRES
La central nuclear de Sellafield, en el noroeste de Inglaterra, el mayor y más antiguo complejo nuclear de Europa, cerró ayer por «precaución» a causa del mal tiempo, anunció Sellafield Ltd. en un comunicado.
«En respuesta a las inclemencias actuales y en las complicadas condiciones meteorológicas que se anuncian en torno a Sellafield (...) la planta ha sido puesta en parada segura y controlada como medida de precaución», agregó la operadora, que anunció la constitución de una unidad de emergencia para gestionar la situación.
No obstante, aseguró que este cierre temporal no tendrá ninguna incidencia «fuera de la planta en materia de medio ambiente o de seguridad nuclear».
Sellafield fue la primera central nuclear en abastecer de electricidad a la población, pero dejó de producirla en 2003. Desde entonces se utiliza para el almacenamiento y tratamiento de residuos nucleares y el reprocesamiento de combustible.
El complejo de Sellafield es más que una planta nuclear, aclaró la operadora en un segundo comunicado, ya que se define como «una pequeña ciudad» en la que conviven más de 10.000 personas.
A causa de los fuertes vientos, las nevadas y las intensas lluvias, muchos de los caminos utilizados por estas personas se han cerrado y no pueden llegar hasta su lugar de trabajo, poniendo en riesgo -en algunos casos- la normal producción y la seguridad de su funcionamiento por falta de personal.
Sin embargo, Sellafield Ltd. quiso tranquilizar a la opinión pública al asegurar que «los niveles de seguridad en todas las plantas se han mantenido y se mantendrán -se espera que el personal de operaciones vuelva a trabajar en cuanto pueda hacerlo-. Y nadie relacionado con la seguridad de la planta la abandonará».
Las fuertes nevadas e inundaciones que están afectando a varias zonas de Inglaterra, Gales y el norte de Irlanda están provocando numerosos inconvenientes e incluso han puesto en riesgo el partido de la eliminatoria del Mundial 2014 entre Irlanda del Norte y Rusia que debía disputarse ayer en Belfast y fue aplazado a hoy.
En el norte de Irlanda se produjeron cortes de energía eléctrica que afectaron a al menos 40.000 hogares. El aeropuerto nacional de la capital tuvo que ser cerrado, aunque el internacional permaneció abierto.
El Gobierno británico negó las informaciones que indicaban que se dispone de reservas de gas para unos pocos días, debido al frío.
Sellafield fue la primera central nuclear en abastecer de electricidad a la población pero dejó de producirla en 2003. Desde entonces se dedica al tratamiento de residuos nucleares y al reprocesamiento de combustible.