Obama confirma la inquietud por la deriva yihadista de la rebelión siria
Barack Obama confirmó ayer en su visita a Jordania la preocupación de Estados Unidos por la deriva yihadista de la rebelión siria subrayando su inquietud porque el país se convierta en «un enclave para el extremismo» que pueda aprovechar el vacío de poder. La misma preocupación comparte la mayoría de países de la Unión Europea, que siguieron sin ceder a la presión de Londres y París para suministrar armas a la insurgencia siria.
GARA | AMMAN
Después de asegurar a el «apoyo eterno» de Estados Unidos a Israel, donde insistió en la receta de la negociación con los palestinos y abordar el conflicto con Irán, el presidente de EEUU, Barack Obama, se ocupó ayer sobre todo de la guerra de Siria, en la etapa de su viaje que le llevó a Jordania.
En Jerusalén ya había insistido en que el presidente sirio debe «marcharse» y advirtió a Damasco contra «la utilización de armas químicas contra el pueblo sirio o su transferencia a grupos terroristas», ignorando la denuncia de Damasco sobre el uso de este armamento por parte de la insurgencia.
Obama rechazó ofrecer a ayuda militar a la oposición siria armada, aunque tampoco se ha opuesto a las demandas de otros países en este sentido, y sí confirmó un «apoyo logístico» y ayuda humanitaria. Una de los argumentos de esta postura es el recelo hacia grupos que forman parte de la insurgencia, cada vez más dominada por el yihadismo.
Ayer en Amán, en una rueda de prensa conjunta con el rey Abdala II, se mostró «muy preocupado» por que Siria «se convierta en un enclave para el extremismo, porque los extremistas prosperan en una situación de caos, prosperan en casos de vacío de poder».
Por ello afirmó que «estamos intentando evitar divisiones sectarias en el futuro estado sirio. Estamos intentando impedir que la opresión no sea sustituida por la opresión, sino por la libertad y las oportunidades».
Uno de los grupos armados que operan en Siria, el Frente Al Nosra, que colabora con el ELS en la lucha contra el Ejército sirio, ha sido incluido por Washington en su lista de «organizaciones terroristas».
Ayuda a Jordania
Por otra parte, Obama anunció una ayuda adicional de 200 millones de dólares para Jordania con el fin de que pueda atender a los más de 460.000 refugiados sirios que se encuentran en su territorio. Obama destacó la importancia de que «la comunidad internacional aumente su compromiso» para ayudar a los desplazados.
En numerosas ocasiones, Jordania a pedido a la comunidad internacional ayuda para hacer frente al flujo de refugiados sirios que podrían llegar a los 700.000 apara fin de año.
No lejos de este encuentro, las fuerzas del régimen sirio y los rebeldes combatían en una zona del sur del país próxima a la frontera con Jordania y a los Altos del Golán, ocupados por Israel desde 1967.
Los enfrentamientos tenían lugar en el puesto militar de Al Alan, en la aldea de Sahm al Golan que, junto a las vecinas localidades de Tsil, Al Shayara, Nafea y Yamla fueron bombardeadas por aviones de combate y artillería. Por su parte, el representante de la red opositora Sham en la provincia meridional de Deraa, Qaisar Habib, dijo a Efe por internet que el Ejército Libre Sirio (ELS) ha capturado en los últimos días muchas de las aldeas fronterizas con Jordania en Deraa.
División en la UE
La preocupación de Obama sobre la insurgencia pesa también en la Unión Europea a la hora de plantear suministrar armas a la oposición.
El Estado francés y Gran Bretaña intentaron ayer convencer al resto de países europeos que acepten suministrar armas a los insurgentes sirios en una reunión informan en Dublín de los ministros de Asuntos Exteriores de la UE.
Pero llegar a una postura común parece difícil por las posturas divergentes que confirmaron tanto el ministro francés, Laurent Fabius, como el británico, William Hague.
Fabius explicó que los Veintisiete «han hablado mucho de Siria y la cuestión del levantamiento del embargo» y urgió a un acuerdo antes de finales de mayo, cuando expiran las actuales sanciones a Siria. «Si queremos levantar el embargo es para permitir desbloquear la situación política, ayudar a la oposición y, evidentemente, hacen falta garantías de que las armas no pueden caer en manos hostiles», dijo Fabius.
Hague añadió, por su parte, que el agravamiento de la situación «clama fuertemente por un levantamiento del embargo a finales de mayo». Londres y París estudian salidas técnicas y jurídicas como distinguir «armamento letal ofensivo» y «armas defensivas», una alternativa difícil de concretar en la ditinción de uno y otro armamento.
Además, si no se llega a un acuerdo entre los socios de la Unión Europea, tanto Londres como París mantienen la opción de actuar unilateralmente. El ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, expresó sus reticencias por el riesgo de que las armas «caigan en malas manos», postura que comparten Irlanda y Austria.
Austria llegó a amenazar con retirar los 400 cascos azules con los que participa en la misión de la ONU en el Golán.
Bélgica pidió garantías sobre el control de las armas antes de aceptar entregarlas a la oposición.
También preocupa el arsenal químico. El Gobierno sirio ha acusado a los insurgentes de haberlo utilizado ya en un ataque en Alepo. Los rebeldes, a su vez, acusan al régimen, pero a Estados Unidos sigue sin constarle el uso de armamento químico por ninguna de las partes.
Esta postura ha enojado al líder de la Coalición Nacional de Fuerzas Opositoras y de la Revolución Siria (CNFORS), Moaz al Khatib, que criticó implícitamente a Estados Unidos por no responder al uso de armas químicas en el país árabe después de haber asegurado que dicha situación sería una «línea roja». «Los líderes de algunos países dijeron que el uso de armas químicas son una `línea roja'. Ahora esas armas se han usado. ¿Qué están haciendo ahora?», se preguntó ayer en una conferencia en Ankara.
Por otro lado, el atentado que acabó con la vida del clérigo suní Mohammad Said al-Buti, y otras 49 personas en Damasco recibió la rara condena unánime y «en los términos más fuertes» del Consejo de Seguridad de la ONU, sin mencionar ninguna responsabilidad, mientras el presidente sirio anunció que «limpiará el país de extremistas».
El nuevo presidente chino, Xi Jiping, llegó ayer a Rusia en su primera visita al extranjero después de su investidura, hace menos de diez días, con el objetivo de fortalecer los lazos económicos y su asociación estratégica. «El hecho de haber elegido la amistosa Rusia para mi primera visita de Estado muestra el carácter particular de nuestras relaciones estratégicas», afirmó Xi en una entrevista con medios rusos. «Hoy las relaciones chino-rusas viven el mejor momento de su historia», añadió. Algunos analistas creen que Pekín necesitará en los próximos años el apoyo del Kremlin en el Consejo de Seguridad de la ONU. También el presidente ruso, Vladimir Putin, necesita coordinar sus posturas con China para hacer de contrapeso a Occidente. Y en esta asociación destaca su postura ante el conflicto sirio. «Rusia y China dan ejemplo con sus posturas equilibradas y pragmáticas en la solución de los problemas más agudos, como es el caso de Oriente Medio, el norte de África, el problema nuclear de la península coreana y la situación en torno al programa atómico iraní», indicó Putin. GARA
La visita de Barack Obama a Israel ha forzado el restablecimiento de relaciones entre dos de sus aliados, enfrentados tras el asalto israelí en 2010 a la Flotilla de la Libertad que pretendía romper el bloqueo a Gaza. Ayer, justo antes de su partida, Obama consiguió el gesto de reconciliación. La llamada telefónica en la que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, presentó sus excusas al primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, retrasó la salida del presidente estadounidense de Israel. «Netanyahu ha hablado hoy con el primer ministro Erdogan. Los dos han convenido normalizar las relaciones entre los dos países, incluida la vuelta de los embajadores y la anulación de los procesos judiciales contra los soldados israelíes», explicó el Gobierno israelí. «Netanyahu ha explicado que los resultados trágicos de la flotilla del Mavi Marmara no fueron intencionados», añadió, y subrayó que «la investigación israelí ha revelado errores operacionales». Aseguró así que el primer ministro «ha presentado sus excusas al pueblo turco por cualquier error que pueda conducir a la pérdida de vidas y ha aceptado una indemnización» a las víctimas.
Erdogan aceptó «en nombre del pueblo turco» las excusas de Netanyahu y subrayó «el carácter estratégico y vital» de las relaciones entre ambos países para «la paz y la estabilidad regional», y lamentó el deterioro que han sufrido. Según el comunicado también acordaron trabajar conjuntamente para «mejorar la situación humanitaria en los territorios palestinos». Las relaciones entre Israel y Turquía, aliados estratégicos en la década de los noventa y fieles a Washington, ya eran tensas tras la operación israelí «Plomo fundido» contra Gaza a finales de 2008. Pero el 31 de mayo de 2010 acabaron por romperse con una crisis diplomática por el asalto a la flotilla en la que murieron nueve turcos. Ankara expulsó al embajador, redujo su representación diplomática en Israel y suspendió la cooperación militar. El pasado febrero Erdogan suscitó más críticas en Israel al calificar el sionismo como «crimen contra la humanidad». El presidente de EEUU, Barack Obama, se felicitó de este acuerdo. «Estados Unidos aprecia profundamente sus estrechas relaciones a la vez con Turquía e Israel y concede una gran importancia al restablecimiento de relaciones positivas entre ellos», indicó. GARA
Cinco personas murieron y 26 resultaron heridas en enfrentamientos en la noche del jueves en Trípoli, Líbano, entre habitantes del barrio suní de Bab el-Tebbaneh, opuestos al régimen de Bashar al-Assad, y los de Jabal Mohsen, partidarios del Gobierno sirio. El Ejército se desplazó a la zona tras la muerte el miércoles de una persona y fue recibido con disparos, según fuentes militares.
El ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, se reunió ayer con el nuevo primer ministro de la oposición siria, Ghassan Hitto, al que transmitió su pleno respaldo.