Funes exige la verdad sobre el crimen de Romero en el 33 aniversario de su muerte
GARA |
Los salvadoreños conmemoraron el 33 aniversario de la muerte del obispo Oscar Arnulfo Romero, un crimen que todavía sigue impune.
Aunque la conmemoración oficial de la Iglesia católica y de la Fundación Monseñor Romero se llevó a cabo por anticipado el pasado día 16 para no interferir con el Domingo de Ramos, una exposición fotográfica, presentaciones musicales y teatrales, romerías, testimonios sobre la vida y obra de Romero y celebraciones eucarísticas recordaron ayer su figura. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, destacó su labor a favor de los pobres y la protección de los derechos humanos.
En honor al prelado, el 21 de diciembre de 2010, la ONU declaró el 24 de marzo como Día Internacional del Derecho a la Verdad de las Víctimas de Graves Violaciones de los Derechos Humanos.
En 1993, una Comisión de la Verdad creada por este organismo culpó como responsable intelectual al mayor del Ejército y fundador de la derechista Alianza Republicana Nacionalista, Roberto D'Aubuisson, ya fallecido. Este partido gobernó El Salvador entre 1989 y junio de 2009.
En su habitual programa radiofónico de los sábados, el presidente, Mauricio Funes, remarcó que el país «aún sigue esperando que la justicia llegue al fondo del caso y revele esa verdad, que no solo se debe a sus familiares, sino a la Iglesia católica y a todo el pueblo salvadoreño», destacó.
El 24 de marzo de 2010, Funes pidió perdón en nombre del Estado. «Fue en vida la voz de los que no tienen voz, y ahora, después de su martirio, siempre será así», afirmó.