A la espera de los índices de audiencia definitivos, el inicio ayer de la tercera temporada de «Juego de Tronos» rubricará las grandes expectativas que ha despertado esta nueva temporada que, al contrario de las anteriores, subrayará los pasajes épicos con mayor rigor. Si en la anterior los protagonistas se limitaban a marchar o regresar de las batallas, en esta oportunidad, los productores han decidido rascarse un poco más los bolsillos para invertir una mayor cuantía económica en los efectos digitales que darán forma a las multitudinarias batallas narradas en los originales literarios de George R. R. Martin.

Al menos, así lo han expresado los creadores de esta superproducción catódica, David Benioff y Dan Weiss: «Hay secuencias -afirman- que llevábamos años esperando a hacer realidad. Van a suceder muchas cosas que serán clave de una manera que creo que no hemos visto ahora... Nuestra intención es que sea la mejor temporada.. Hay secuencias que llevábamos años esperando a hacer realidad y que están muy cercanas al material literario original».

Los temas principales sobre los que versarán las tramas de esta temporada, giran en torno al concepto «ascenso y caída», explica David Benioff. «En la tercera temporada, algunos personajes conseguirán un gran poder y otros se hundirán por completo».

Titulada genéricamente «Tormenta de espadas», la nueva entrega de esta saga que cuenta a sus seguidores por millones, se ha convertido en el inevitable escolló que debían atravesar sus responsables ya que las batallas figuran entre los aspectos más destacados de la narración de George R. R. Martin. Probablemente, si el éxito no hubiera sido tan considerable, jamás se hubiera podido rodar. Por otro lado, también topamos con el reto que han asumido sus responsables en su intento por no defraudar a su audiencia. Al igual que acontece en esta saga catódica, las espadas están en alto... expectantes.