La presidenta del Gobierno navarro, Yolanda Barcina, viajó ayer a Madrid, donde se reunió con la ministra española de Fomento, Ana Pastor, con quien suscribió un acuerdo para poner en marcha dos nuevos tramos del TAV en Nafarroa, los correspondientes a los trayectos entre Alesbes y Erriberri y de Erriberri a Tafalla, según informó el Gobierno navarro en una nota.

De este modo, Barcina, que no ha comparecido públicamente en Nafarroa desde que la pasada semana se conoció que la juez María Paz Benito citaba para que declarasen como imputados a Miguel Sanz, Álvaro Miranda y Enrique Maya, viajó hasta Madrid para dar un nuevo impulso a la construcción del denominado «corredor navarro del TAV».

El Gobierno navarro sigue empeñado en financiar el tramo entre Castejón e Iruñerria a pesar de que Madrid ha dado repetidas muestras de que no tiene intención de cumplir su compromiso de construir la conexión entre Castejón y la actual línea de TAV entre Madrid y Zaragoza.

Con el acuerdo suscrito ayer en Madrid, Barcina continúa destinando millones de euros a la construcción de una macroinfraestructura mientras sigue aplicando recortes antisociales en materias tan sensibles como educación, sanidad y servicios sociales.

El Gobierno navarro destacó ayer que uno de los cinco subtramos de la línea Castejón-Iruñerria ya está adjudicado. Se trata del trayecto Castejón-Alesbes, de 14,5 kilómetros, lo que supone el 20,75% del recorrido. El segundo tramo (Alesbes-Erriberri), de quince kilómetros, cuenta con el proyecto básico, aprobado técnicamente por ADIF desde febrero de 2012. El tercer tramo (Erriberri-Tafalla), de quince kilómetros, también cuenta con esa aprobación. ADIF ha dado recientemente el visto bueno para proceder a la fase de información de los tramos dos y tres.

Por lo que se refiere al cuarto tramo (Tafalla-Campanas), de 15,19 kilómetros, se está redactando el proyecto básico, al igual que en el quinto (Campanas-Ezkirotz).

Junto a ello, el Gobierno navarro destacó que el Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal (PSIS) para la construcción de la nueva estación de tren está aprobado definitivamente desde 2010 y avanzó que el próximo paso será procedr a la contratación para la reparcelación y la urbanización de las zonas afectadas.

El proyecto de nueva estación para el TAV de Iruñerria tiene previsto financiarse con la construcción de viviendas, lo que cuestiona también su viabilidad teniendo en cuenta la drástica ralentización del mercado inmobiliario.