Maite SOROA | msoroa@gara.net
Uno que no quiere dar alas a los comunistas
Con la que está cayendo a cuenta de los desahucios y el drama diario que miles de personas sufren por este motivo, servidora no esperaba encontrar a nadie que tuviera la desfachatez suficiente para defender que una familia pueda quedarse sin techo, desampara y sin recursos. Estaba equivocada. En «Libertaddigital» -dónde si no- un tal Manuel Llamas titulaba su pieza con un elocuente «Sí a los desahucios». Por lo menos no lleva a engaño. El personaje en cuestión argumenta que la Iniciativa Legislativa Popular que pretende poner freno a esta práctica «perjudica de forma directa a la inmensa mayoría de los españoles, ya que tendría efectos desastrosos, en términos hipotecarios, financieros y económicos, sobre el conjunto del país. Lo trágico es que su contenido -la última muestra del triste qué hay de lo mío- ha cosechado el apoyo de la inmensa mayoría de la población y de la clase política, pese a que se sustenta en una retahíla de falacias y mentiras, como que los desahucios son un `drama social' o que la Ley Hipotecaria es `abusiva' e `ilegal'». ¿Falacias y mentiras? Me sé de alguna que si lo pillara por banda le iba a explicar qué es una falacia... Según Llamas, «los embargos hipotecarios no sólo no son condenables, sino que, muy al contrario, resultan imprescindibles para garantizar la propiedad privada y el estricto cumplimiento de la seguridad jurídica. No en vano el desalojo de una vivienda supone, simple y llanamente, la restitución de la propiedad a su legítimo dueño por incumplimiento de contrato». Contratos draconianos en la mayoría de las veces, pero qué importa si se garantiza la propiedad privada.
Dicho esto, y como colofón, el columnista del digital de Jiménez Losantos critica incluso al PP, por blando. Lean: «La profunda irresponsabilidad y escasez de miras que ha mostrado el Gobierno del PP alineándose con la PAH, en mayor o menor grado, mediante la paralización temporal de desahucios, la creación de un fondo de alquiler social y la reforma de la Ley Hipotecaria está dando alas a los comunistas para ir mucho más allá: ahí están decretando incluso la `expropiación temporal' de inmuebles inmersos en un procedimiento de desahucio». Algunos la sensibilidad la tienen en la chequera.