La historia de Emon es la pelea de tantas y tantas bandas por conseguir un espacio y un perfil. En 2007 surgen las primeras charlas, las ideas de futuro. De esa época se mantienen en el grupo Aritz Alustiza, trikitixa, y Ekaitz Otxoa, batería. Isusko Igarza, trombón, fue también de los primeros. Después llegarían Dihane Sarasola, voz, Andoni Larraza, trompeta, Eneko Longarte, voz y guitarra, y Ander Ariznabarreta, bajo. Dihane abandonaba el grupo hace meses por razones personales.

Aritz imparte clases de triki y es de Bergara, como Isusko y Ekaitz. Andoni reside en Orio, Ander en Soraluze y Eneko en Durango. Eneko pasó por Nabari y es voz y guitarra de Hilbete. Su base se encuentra en Bergara.

«Konfeti kolore»(Baga-Biga) es su debut, álbum de un impacto inmediato. Ska, merengue, cumbia... y una sabrosa rumbita se funden llamativamente y con una calidad y pegada extraña para un grupo que debuta.

Emon se parecen a otros grupos coloristas, pero sus composiciones y proyecto es tan sólido que puede ser, con absoluta dignidad, uno más entre los establecido. Ahora solo resta que la primavera y el verano les permitan tocar y expandirse.

¿Con esta sonoridad y canciones cómo librarse del peaje a pagar por asemejarse a bandas como Esne Beltza, La Pegatina, Joxe Ripiau, Manu Chao, Betagarri, FM...?

Eneko: Todos vivimos bajo influencias en todos los ámbitos de la vida, ya sea por lo que vemos en nuestra casa o en la del vecino. La verdad es que, aparte de tener estilos preferentes en la música, también tenemos artistas preferentes en cada estilo. Antes de ir al local a exponer o crear ideas, por el camino estás escuchando o cantando música que te gusta. No es posible sustraerte a la influencia de lo que te sugiere, pero no tenemos nada que esconder porque eso que nos influye es con lo que disfrutamos y lo que nos encanta. De hecho, esas influencias que mencionas están a su vez influidas por músicos anteriores y es lo bonito de la música. Esto es un suma y sigue y con el paso del tiempo todo evoluciona y cada músico aporta su «Konfeti» y su «kolore».

Así que las huellas no dejan de ser otra cosa que las huella de la historia y las que Emon también dejará.

Aritz: Es lo que hemos mamado. Estuvimos en primera fila de los conciertos de todos los artistas mencionados, disfrutando de lo que escuchábamos. Ahora son huellas inconscientes. Si tuviéramos la oportunidad de tocar individualmente con cualquiera de los artistas señalados estaríamos encantados. Pero son huellas espontáneas, señas sin planificar, marcas de etapas de nuestras vidas. Huellas dactilares que siempre nos acompañarán.

También está por ahí Muchachito Bombo Inferno tomado con mucha dignidad. ¿Son ya competitivos como esos maestros como referentes?

E: Nos parecen proyectos muy originales y que nos han impactado mucho y que envidiamos, y lo decimos sin ningún tipo de tapujo. Nosotros hemos ido haciendo las cosas sobre la marcha disfrutando del momento y nos damos cuenta de que todavía nos queda mucho por aprender. Este tipo de proyectos primero nacen y luego se hacen, pero lo que sí hemos encontrado es el camino correcto, a nuestro parecer. Hemos nacido y ahora tenemos que ir madurando sabiendo lo que queremos y con realismo. Queremos disfrutar de la música y que la gente pueda fundirse con nosotros. Ese sería el punto extra de satisfacción y realización para nosotros. Todo lo que pueda llegar a partir de ahora será bienvenido.

La mejor defensa, de necesitarla, siempre son las canciones, y por ahí, al margen de la calidad de los músicos, está la labor de composición, brillante en este debut.

E: Aritz, Ekaitz, Isusko y Eneko. somos quienes hemos llevado las riendas del proyecto, pero hay que destacar que tanto Ander como Andoni han hecho excelentes aportaciones. Axular también ha colaboración y agregado su punto de vista. Ha sido un proceso duro y largo porque no solo ha dado el fruto del disco que puede ser lo que aprecie la gente, si no que hemos cambiado la forma de trabajar, la filosofía del grupo y el rumbo que llevábamos. Por ejemplo: hemos dado pie a trabajar estilos que nunca antes habíamos previsto. Y es que ¿por qué disfrutar solo de esos estilos escuchándolos al resto de grupos cuando podemos disfrutarlo haciéndolos nosotros?. Experimentar todo eso conlleva esfuerzo y dedicación, pero ahora, mirando al horizonte, ya sabemos lo que queremos y vamos hacia ello.

Cabe imaginar que ha tenido que haber una buena criba de canciones e ideas para perfilarse mejor como banda.

A: Sí, nos impusimos un criba de ideas según las íbamos desarrollando. Teníamos claro que no todo lo que creábamos se iba a ajustar a lo que pretendíamos. Son muchos quebraderos de cabeza los que hemos pasado y muchas veces nos quedábamos atascados entre ideas. Pero viendo el resultado podemos decir que ha merecido la pena, además estamos seguros de que la siguiente vez sera todavía una criba más exigente, porque, para bien o para mal, tendemos a ser cada vez mas perfeccionistas; eso sí, sin olvidarnos de disfrutar con el proceso.

¿Es posible que hayan hecho algo mal para no estar ya en primera fila o es aún un poco pronto?

E: Habremos hecho cosas mal, como todo el mundo, así es el proceso de aprendizaje. Los comienzos siempre son duros, pero con este proyecto no creo que hayamos cometido ningún error fatal como para no poder estar a la altura. Acabamos de nacer y cuando el tiempo hable y la gente nos conozca sabremos a qué nos vamos a enfrentar. Pero si algo tenemos claro es que sea cual sea la respuesta nuestra filosofía seguirá siendo la misma.

«Konfeti kolore» es muy sólido en composición, pero también han tenido la pericia de incluir arreglos muy oxigenantes.

E: Esta es una apuesta clara por el rigor. Hemos intentado ser muy críticos con el trabajo a la par que ido aprendiendo. como el valor del detalle, por eso hemos cuidado todo lo que ha estado en nuestras manos. Esta es la primera vez que nos metíamos en un proyecto tan amplio, pero hemos aprendido rápido para darles ese plus a las canciones.

Textos propios y de bertsolaris.

A: Han colaborado Itxaso Paia, Maialen Arzallus, Iratxe Ibarra, Jokin Uranga e Iñaki Gurrutxaga, el resultado ha sido esplendido. El resto de letras las hemos hecho el grupo dejando volar la imaginación.