El fútbol siempre gira en torno a dos situaciones, las transiciones defensa-ataque y ataque-defensa. El modelo ofensivo del Athletic de Bielsa tiene referencias posicionales muy marcadas: de una referencia inicial de 4-3-3 pasa a un sistema posicional ofensivo de 2-3-2-3. Un estilo que se sustenta en disponer muchos jugadores por delante del balón, una gran movilidad de sus jugadores, una velocidad y un ritmo de juego muy altos, y utilizando la conducción como recurso habitual. Ese ataque combinativo de 2-3-2-3 genera una gran amplitud entre jugadores, tiene el juego corto como principal elemento para dar salida al balón, pero también implica pocos mecanismos de seguridad ante la pérdida de la pelota. El juego se elabora a través de la amplitud que otorgan los laterales y de la superioridad numérica con la gente de fuera yendo hacia dentro. Todo enfocado para que en la finalización lleguen muchos jugadores a la zona de remate.

Velocidad y ritmo muy alto que implica tener jugadores inteligentes en la interpretación, físicos para el trabajo que se necesita y con cierta dosis de mesura en la toma de decisiones, ya que el ritmo de juego lo marca el juego, unas veces podrás correr vertical y otras tendrás que abrir buscando amplitud, para luego buscar profundidad y progresión, siempre en función de los compañeros que tengas por delante del balón y contrarios que pretenden neutralizar tu juego. En mi opinión, es más importante escoger la zona y el ritmo que tiene que tener el juego, que la calidad técnica en la ejecución, aunque claro está, ambas estén relacionadas.

Por lo que al modelo defensivo se refiere, evidentemente es arriesgado, intenta ser muy agresivo y se expone también demasiado. Arriba, si el rival sale de su presión inicial, muchos jugadores quedan desbordados. Indudablemente, en un fútbol tan arriesgado, la toma de decisiones correcta es fundamental y no es lo mismo tener un jugador de categoría o a gran nivel como la temporada pasada lo eran o estaban Javi Martínez o Amorebieta, que sepa leer lo que pueda pasar, lo que da idea de que para plasmar este método de juego los jugadores tienen que estar a un alto nivel y minimizar al máximo los errores.

Es verdad que se habla mucho de la defensa al hombre que practica el Athletic, pero si el marcaje al hombre suele tener estipuladas unas zonas de actuación, no es tan al hombre como creemos. Por ejemplo, por detrás del balón se establecen vigilancias, nunca defensa al hombre y la mixta, y requiere una gran dosis de interpretación. Luego, si no tienes jugadores que sepan pensar, vas a sufrir, porque va a haber muchas líneas de intersección entre la zona y la defensa al hombre, que va a ser difícil de establecer. A mi juicio y en resumen, la propuesta de Bielsa busca recuperar el balón de forma rápida para generar cosas con él. Lo que pasa es que muchas veces si no defiendes bien, tampoco estás bien organizado para atacar.