El Elche no dio opción a que Itxako albergara ilusiones de puntuar, y encarriló el marcador desde el pitido inicial, rompiéndolo completamente antes del descanso. En la segunda mitad Itxako peleó por reducir la desventaja y se encontró con dos tiempos muertos solicitados por José Ignacio Prades que mosquearon bastante al banquillo navarro (uno con el marcador 17-27, y otro a 7 minutos del final). El empate posterior en Etxebarri dejaba a Itxako en la penúltima posición.