Los Angeles Lakers y Boston Celtics están a punto de recibir la extremaunción en estos play offs por el título. Ambas franquicias, dos de las más míticas de la NBA, pierden por 3-0 sus respectivas eliminatorias ante San Antonio y Nueva York tras haber caído en su feudo.

La derrota más humillante ocurría en el Staples Center. La hinchada angelina acabaría abucheando a sus jugadores y solicitando el regreso de Phil Jackson a los banquillos tras sucumbir por 89-120 ante unos Spurs comandados por los 26 puntos y 9 rebotes de Tim Duncan. La peor noticia para San Antonio fue la torcedura del tobillo izquierdo de Tiago Splitter.

Sin Kobe Bryant, Steve Nash, Jodie Meeks y Steve Blake, lesionados, los Lakers no pudieron plantar cara a los texanos. «Las lesiones nos han asesinado», declaraba un resignado Pau Gasol, que sumaba su «triple doble» más inútil: 11 puntos, 13 rebotes y 10 asistencias; el mejor angelino junto con los 25 puntos y 11 rebotes de Howard.

En Boston, los Celtics volvían a no poder con Carmelo Anthony, que se fue a los 26 puntos para un marcador de 76-90 para los Knicks. Pablo Prigioni salió de titular, disputó 30 minutos y aportó 9 tantos y 5 robos.

Además, Golden State Warriors se adelanta 2-1 tras derrotar por 110-108 a Denver Nuggets. Stephen Curry, con 29 puntos y 11 asistencias, lideró una vez más a los de Oakland. Aun así, Iguodala casi volteó el marcador con un triple a la desesperada desde medio campo, pero su tiro se quedó en el aro.