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EH Bildu llama a secundar la huelga general del 30-M para que sea «punto de inflexión»

EH Bildu llevó a sus representantes al Museo Marítimo Vasco, que ocupa una parte de lo que fue el antiguo astillero Euskalduna, símbolo de la lucha obrera, para hacer un llamamiento a la población vasca a secundar la huelga general del próximo 30 de mayo (30-M) convocada por la mayoría sindical y social. «Desde la humildad -dijeron Amaia Izko y Oskar Matute- nuestro grano de arena para que sea un éxito y un punto de inflexión en la historia de este país».

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Juanjo BASTERRA | BILBO

A unos metros de la grúa Carola, donde se situaban las gradas del antiguo astillero Euskalduna, símbolo de la lucha obrera, Euskal Herria Bildu reunió a sus cargos políticos para hacer un llamamiento a la huelga general del 30 de mayo (30-M), convocada por ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, EHNE, Hiru y CNT y más de medio centenar de colectivos sociales.

Amaia Izko y Oskar Matutes explicaron a los medios de comunicación que «comparecemos en este lugar emblemático de la historia de Euskal Herria para la lucha obrera, con el objetivo de apoyar de manera activa y decidida la huelga general». Indicaron que «lo hacemos aportando, desde el respeto y la humildad, nuestro grano de arena para lograr que dicha convocatoria sea un éxito y un punto de inflexión en la historia de nuestro país».

Al encuentro se acercaron Laura Mintegi, Joseba Permach, Rufi Etxebarria, Belén Arrondo, Dani Maeztu, Hasier Arraiz, Arantza Urkaregi, Unai Ziarreta y, entre otros, Niko Moreno.

La sexta huelga general que se convoca en Hego Euskal Herria durante la crisis económica actual «ha de ser, también, el punto de arranque de una dinámica de movilizaciones y empoderamiento ciudadano que haga frente a los ataques directos que está sufriendo la ciudadanía», dijo Amaia Izko. Añadió que «decimos ataques directos porque los gobiernos que pretenden dirigir nuestras vidas desde Gasteiz, Iruñea y Madrid hace tiempo que decidieron darle la espalda a la ciudadanía para ejecutar los dictados de los grandes poderes financieros». A juicio de la portavoz de este acto en las antiguas gradas del Euskalduna, «un sistema realmente democrático no desahucia; no privatiza, y no condena al paro ni a la miseria a la ciudadanía para seguir manteniendo el umbral de beneficios de unos pocos».

Para «reconquistar» la democracia, EH Bildu exige «la soberanía para Euskal Herria. Son las mujeres y los hombres que conforman este país quienes deben decidir y poner en pie las políticas para desarrollar un modelo diferente al actual». Amaia Izko insistió en que el pueblo vasco «ya se ha expresado una y mil veces contra las políticas que dicta la Troika y nos imponen desde Madrid, contra los recortes antisociales y las reformas laborales que pretenden convertir la dignidad de las personas en un ejército de parados dispuestos a aceptar la precariedad para no verse abocados a la pobreza más absoluta».

«Suplantan al pueblo»

Oskar Matute expresó que «necesitamos soberanía para transformar un modelo caduco e incapaz de garantizar las necesidades y la dignidad de las personas». Porque afirmó que «no solo agoniza por la crisis de los mercados financieros», puesto que antes de la misma «la mitad de la población ya estaba en crisis y ya estaba sometida mucho antes de estallar cualquier burbuja financiera».

Matute denunció que «la clase política que no representa al pueblo» porque decidió «hace tiempo suplantarlo, quiere volver a condenar a las mujeres al hogar y perpetuarlas en un trabajo, no reconocido, ni remunerado. De la misma manera que condena a los y las jóvenes a un futuro incierto de precariedad y desempleo».

Ante las críticas de los gobiernos y las patronales a la convocatoria de la huelga general del 30-M, el parlamentario de EH Bildu dijo «discrepar» de que no sea el momento de la movilización. «De lo que no es momento es de recortar, de precarizar, de privatizar y de atacar los derechos sociales. Lamentablemente, para Confebask, CEN y la CEOE, y para sus representantes institucionales Urkullu, Barcina y Rajoy, siempre es buen momento para castigar a la ciudadanía». Recordó la retirada esta misma semana «de los presupuestos antisociales» o el anuncio del presidente español de nuevas reformas y recortes.

Oskar Matute dijo que sobran razones para ir a la huelga. «Desde cada uno de los 235.000 parados, de quienes se quedan sin prestaciones económicas y no tienen acceso a un empleo, hasta los cientos de personas que, según Mario Fernández, son deudores de mala fe y ha decidido echarles de sus casas por no poder pagar la usura de una banca sin escrúpulos».

Transformación

Pero el representante de EH Bildu se quedó con una sola: «el 30 de mayo saldremos a la calle para acompañar a la gran mayoría social que quiere transformar Euskal Herria desde parámetros de izquierda.

Así, llamó «a secundar una huelga que tiene que servir para sellar la alianza y el trabajo en común de los que exigimos soberanía para decidir aquí y construir entre todos y todas un modelo público que garantice los derechos sociales de la mayoría frente al actual, que defiende tan solo los de una minoría privilegiada».

euskalduna

El anuncio de la formación soberanista se produjo en lo que fueron las antiguas gradas del astillero Euskalduna -hoy Museo Marítimo Vasco-, símbolo de la lucha obrera en la defensa del empleo del sector público naval.

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