CLEBA LEÓN 23

KUKULLAGA 24

Esta vez la moneda salió cara. Kukullaga arrastraba la sensación de que, pese a merecerlo, algunos puntos se les habían escapado, quizá por falta de experiencia en los minutos decisivos. Pero esta vez, cuando más lo necesitaban, por fin acertaron a jugarlos mejor que su rival. Con empate a 23 y minuto y medio por delante, Lydia Montes paró el tiempo para preparar el último ataque. Esta vez sus jugadoras interpretaron sus instrucciones con la cabeza fría para marcar el gol decisivo, y lo defendieron con uñas y dientes en los segundos finales.

Kukullaga viajó a León con la convicción de que debía ganar para poder seguir dependiendo de sí mismas en este tramo final liguero y, durante los primeros 25 minutos, mantuvieron el pulso con el Cleba. Pero en los instantes finales tres pérdidas de balón permitieron a las leonesas salir al contraataque y marcharse con ventaja al descanso.

Otra vez tocaba remontar, con el agravante de que no hacerlo dejaba a Kukullaga al borde del descenso. Pero volvió a salir el espíritu de lucha de las vizcaínas, y su 5:1 defensivo sirvió para ir recortando distancias, pese a que Bayón tuvo que retirarse a diez minutos del final por un golpe. Pero la pelea, un poco de suerte, y el acierto final, esta vez dieron sus frutos.

Por cierto, Maialen Agirregomezkorta se sentó en el banquillo, por primera vez como jugadora, superada ya su lesión.