El Gobierno navarro declaró ayer de emergencia las obras para retirar el desprendimiento y estabilizar el talud del desmonte de la N-121-A, Iruñea-Behobia, lo que permitirá acelerar los trabajos, dado el riesgo de incremento de accidentes por el masivo uso del antiguo puerto de Belate. Así lo avanzó en conferencia de prensa el consejero de Fomento, Luis Zarraluqui, quien explicó que ese desprendimiento ha inutilizado el paso por una vía muy concurrida, lo que ha obligado a desviar la circulación por Belate, una solución «peligrosa».