La revista «Ekintza zuzena» cumple 25 años agitando conciencias
A fines de los años 80, en medio de una Euskal Herria convulsa, con multitud de jóvenes implicados en okupaciones, iniciativas antimilitaristas y proyectos de contrainformación como telón de fondo, nace en Bilbo la revista libertaria «Ekintza Zuzena». Un cuarto de siglo agitando conciencias y dinamizando debates.
Alvaro HILARIO
Los años 80 fueron tiempos convulsos en lo político, lo económico y lo social. Además, en nuestro país se formó una clase juvenil dispuesta a reclamar lo suyo, dispuesta a comerse el mundo. Se sucedían las okupaciones de pisos para vivir, de edificios para crear gaztetxes y centros culturales, los conciertos de punk, las maquetas autoproducidas, las distribuidoras sin ánimo de lucro, los proyectos contrainformativos... «En los años 80 había todo un mundo nuevo: una nueva escena musical, revuelta y, por ejemplo, muchos proyectos de contrainformación, desde los panfletos y las agencias de noticias alternativas a las radios libres y los fanzines», recuerda Jabi Bayón, miembro del colectivo editorial de la revista «Ekintza Zuzena»
En ese contexto e influenciados por el mundo libertario, la CNT y los ecos de la guerra de 1936 empieza a gestarse la revista: «Un grupo de gente muy joven y algún veterano decide formar un colectivo que se llamó Arkadia y del que, más adelante, nacería otro, Iraun. Es este segundo, un colectivo libertario al uso (dedicado a la agitación, la propaganda) el que decide, en 1988, sacar la revista como portavoz del colectivo. Una publicación con una estética muy de la época, muy punk», sigue contando Jabi.
Después de dos años, Iraun opta por disolverse como colectivo: «Vimos que nuestro trabajo, que el nuestro de activismo era estéril; era muy de eslogan y poco enriquecedor en lo personal; vemos que la propia revista podía convertirse en una plataforma orientada hacia la formación política y lanzar un mensaje más elaborado hacia fuera. Así decidimos disolver el grupo y seguir como colectivo editor de la revista».
A partir de ese momento, la publicación fue evolucionando, siempre condicionada por los cambios políticos: «El mítico 1992 trajo muchos cambios. Las radios entraron en crisis: en Bilbo se pasa de tener cerca de una docena a tener dos. De las decenas de fanzines que había en Euskal Herria desaparecen casi todos (en los 90 quedan «Ekintza Zuzena», «Resiste» y pocos más). También la música cambia, se profesionaliza, se hace más seria. Respecto a nosotros, el modelo fanzine entra en crisis: la fórmula y la estética están viejas, los artículos son panfletarios y poco profundos...». «Ekintza Zuzena» deja todo esto atrás: «Apostamos entonces por un salto cualitativo en fondo y forma: más elaboración, más colaboradores, mejor redacción; un proyecto más sólido y con una presentación de revista. Se pasa de aquella condición de fanzine punk, del `hazlo tú mismo', a una revista de pensamiento, de formación, a la revista que hoy hacemos», explica Bayón.
Aunque su tirada es de 2.000 ejemplares, «Ekintza Zuzena» es conocido en medio mundo: «Son cosas del boca a boca, de los viajes personales en los que llevas la revista en la maleta... es increíble, pero las cosas se distribuyen y corren por todos lados. En Sudamérica, con una humilde distribución, se nos conoce bastante. También funcionamos intercambiando nuestra publicación con otras y enviándola por correo a quien la pide», detalla.
A nivel de Euskal Herria y Estado español funcionan otros mecanismos de distribución: «Siempre hemos optado por la distribución alternativa. Nos distribuye gente concreta, centros sociales, colectivos libertarios, distribuidoras sin ánimo de lucro. En Euskal Herria el colectivo también se implica en la distribución a niveles locales».
Ahora tienen entre manos el último número, el 40, y las jornadas para celebrar estos 25 años de agitación y formación.