El pleno del Parlamento Europeo aprobó ayer un informe en el que critica los «severos recortes» a las pensiones que han realizado los países en crisis para reducir su déficit y reclama que las prestaciones públicas garanticen un nivel de vida digno a los jubilados. En la declaración, la Eurocámara deplora los ajustes en pensiones «que han empujado a muchos pensionistas a la pobreza o les hacen correr el riesgo de caer en ella».

En esta línea, los parlamentarios piden a los estados miembro que se planteen reformar sus sistemas de pensiones «tomando en consideración el cambio de la esperanza de vida de manera que se garantice un nivel de vida digno y una independencia económica para las personas de más edad, en especial las que pertenecen a grupos vulnerables».

Defienden, además, combinar una pensión pública universal con planes profesionales e individuales y proponen normas que garanticen la conservación de los derechos de pensión cuando el trabajador cotiza en diferentes países de la Unión Europea.

Por otra parte, el texto aboga por la mejora de las condiciones laborales, el fomento del empleo de calidad y la lucha contra el trabajo sumergido, lo que -según destaca- permitiría que hubiera más cotizantes y que los trabajadores cotizaran más tiempo.

El Parlamento Europeo recuerda finalmente la necesidad de tener en cuenta el desafío que la igualdad de género plantea en este asunto, ya que solo en Europa el 22% de las mujeres mayores de 75 años se encuentra por debajo del umbral de la pobreza.

En este sentido, se propone la introducción de los denominados «créditos por pensión», es decir, la posibilidad de contabilizar como tiempo de trabajo el dedicado al cuidado de personas dependientes, generalmente no remunerado y desempeñado por mujeres.

«Lista negra» de paraísos

Durante el pleno, la Eurocámara también pidió a los gobiernos europeos «medidas drásticas» contra los paraísos fiscales, evitar las fisuras en la ley que permiten la evasión y asumir una actitud «agresiva» contra los que de forma premeditada eluden al fisco a través de asesoría fiscal, ya que consideran «escandaloso» el ámbito de fraude fiscal transfronterizo.

Asimismo, llamaron a crear un sistema de intercambio de información fiscal entre los países de la UE y redactar una «lista negra» de paraísos fiscales.