A poco más de 24 horas para la hora de la verdad, la tensión se palpa en el ambiente por lo que hay en juego. Si el día frente al Getafe era obligatorio hacerse con los tres puntos para no hundirse en la tabla, mañana es del todo imprescindible el triunfo para continuar un año más en la máxima categoría. Todos los partícipes en la conjura por la salvación -jugadores y aficionados- ya están a estas alturas comiéndose las uñas por lo que se avecina, aunque los primeros tendrán que controlar esos nervios para que la situación no se vuelva en su contra.

Ese fue uno de los mensajes que lanzó el capitán rojillo, Patxi Puñal. «No nos pueden atenazar los nervios. Hay que darle duro, pelear el partido a muerte y tener acierto, seguir, seguir y seguir hasta buscar el gol. Ahora mismo es igual quién venga a nuestro campo, estamos obligados a apretar y generar ocasiones», emplazó el uharterra, que será un fijo en el once, dada la trascendencia del encuentro.

Como ya ocurriese en los días previos a jugar contra Getafe y Granada, cuerpo técnico y plantilla se citaron en una sesión a puerta cerrada en el escenario de la final, lejos de luz y taquígrafos, para preparar algunas jugadas de estrategia y, sobre todo, darle realce a la relevancia del choque. Una táctica que dio buenos resultados contra los azulones y que se confía en que vuelva a manifestarse como eficiente ante los hispalenses en un envite sin par.

«Son partidos que tienen todos los alicientes que se pueden buscar. Es un encuentro en el que nos jugamos la permanencia, en nuestra casa, con nuestra gente y con el estadio lleno. Si ganamos es fácil que ya estemos salvados. Es un choque al que no se le puede pedir más», definió el pivote navarro.

Lo cierto es que Osasuna se ha sabido mover como pez en el agua en este tipo de enfrentamientos durante los últimos tiempos, una razón más para pensar que mañana no vaya a ser una excepción, aunque ello no significa que el objetivo no vaya a estar exento de dificultad. «No vamos a ganar porque sí, tenemos que conseguirlo haciendo las cosas bien ante un rival que está acostumbrado a pelear en cualquier campo. Si no apretamos, lo tendremos muy complicado», avisó Puñal.

Rubén y Damià

Rubén y Damià, los dos tocados de la plantilla, tomaron parte en la sesión matinal celebrada en El Sadar al mismo ritmo que el resto de sus compañeros. Ello hace pensar que ambos puedan estar, en principio, a disposición de Mendilibar. Otra cosa es que el técnico zaldibartarra opte por alternativas más fiables para un choque que va a ser de una exigencia máxima, como es el caso de Oier, pese a que ya lo dejó en el banquillo contra el Getafe, algo que no debería repetirse.